Uno de los puntos débiles de los coches eléctricos sigue siendo el tiempo que necesitamos para recargarlos. Entre la amalgama de soluciones que hay sobre la mesa ha comenzado a coger fuerza una energía alternativa: ¿por qué no aprovechar la carrocería del vehículo para instalar paneles solares con los que cargar su batería mientras está en marcha o aparcado? Al grupo de coches solares formado por el Lightyear 0, el Sono Sion o el SEV de Aptera, entre otros, se une una nueva opción: Tianjin.
Por su nombre, el mismo de la ciudad en la que ha sido diseñado, desarrollado y fabricado, habréis deducido que su origen es asiático: Tianjin es un coche solar que procede de China y forma parte de un proyecto integrado por tres universidades y 42 empresas. Llega con el objetivo de ser eficiente, pero también asequible. Y para lograrlo emplea, solamente, energía solar como ‘combustible’.
Un urbano sin acelerador y sin volante
Tianjin es un urbano que mide 4,08 metros de largo, 1,77 metros de ancho y 1,81 metros de alto. Su distancia entre ejes es de 2,85 metros y pesa 1.020 kilos. Su diseño huye de cualquier principio aerodinámico: apuestas por líneas rectas y formas muy cuadradas para concebir un amplio interior, que tiene capacidad para cuatro personas (una se sitúa en el asiento delantero y el resto en la banqueta trasera).
En el vídeo de presentación del Tianjin podemos reconocer otros peculiares detalles de este coche solar: lo que más llama la atención es la ausencia del volante, que ha sido sustituido por una pantalla situada en el salpicadero. Cuenta, además, con un botón rojo (todo apunta a que serviría para efectuar una parada de emergencia) y un pedal de freno: no, no hay acelerador.
75 kilómetros de autonomía
Hablar del Tianjin es hacerlo de un coche solar, pero ¿dónde reside ese carácter? Como es lógico, en el techo: es ahí donde encontramos una superficie solar de 8,1 metros cuadrados que genera hasta 7,6 kWh de electricidad en un día soleado. Con ese nivel de energía es posible recargar de forma constante la batería de iones de litio (de alta densidad: 330 Wh/kg) que impulsa su motor y le permite recorrer hasta 75 kilómetros a una velocidad máxima de 80 km/h. Según sus creadores y comparado con un vehículo normal, cien kilómetros a bordo de este coche solar genera una reducción de 25 kilos en las emisiones de carbono.
A esto hay que añadir la presencia de 47 tecnologías avanzadas (no especifican cuales) dignas de segmentos superiores al urbano… y del futuro. El Tianjin ofrece, como mínimo, conducción autónoma de Nivel 4: teniendo en cuenta que los niveles en China no son los mismos que en Europa, esto quiere decir que es capaz de circular siguiendo una ruta establecida por el sistema.
Tras ser presentado en sociedad, ha comenzado una gira para dar a conocer el Tianjin en China: quizás este tour sirva para concretar fechas de producción e, incluso, precios.