Toyota se juega mucho en esta edición de las 24 Horas de Le Mans. Tras el retorno de Gazoo Racing al WEC, el título se les ha escapado en las dos últimas ediciones de la carrera de resistencia por excelencia, yendo a parar a las manos de los Porsche 919 Hybrid. Tras la retirada de Porsche de las carreras de resistencia – y su paso a la Fórmula E – Toyota se encuentra en una posición idónea para alzarse con el triunfo. Este fin de semana se celebrarán las 24 Horas de Le Mans, y la marca japonesa está ya calentando el ambiente, con tres Toyota GT 86 inspirado en algunos de sus coches de resistencia más icónicos.
Mejor dicho, en las decoraciones que estos coches portaban orgullosos, con un lugar destacado en la memoria colectiva del mundo de la competición de resistencia. Todos estos Toyota GT 86 están de estricta serie a nivel de mecánica, pero se ha retocado su aerodinámica y tren de rodaje. Se ha instalado en la parte trasera de los coches un alerón de dimensiones generosas, un escape Miltek Sport de acero inoxidable y unos muelles que reducen la altura al suelo de los coches. Cada unidad lleva llantas que replican las que tenían los coches de competición en los que están inspirados.
Toyota GT86
El primero de los Toyota GT 86 está inspirado en el Toyota TS010 del año 1992. Un coche de resistencia de la era del Grupo C cuya decoración tenía tonos azules y estaba patrocinada principalmente por Casio. Aquél TS010 estaba animado por un motor de Fórmula 1, un V10 atmosférico de 3,5 litros, capaz de desarrollar la friolera de 700 CV. Uno de los Toyota TS010 logró un segundo puesto en las 24 Horas de Le Mans, sólo por detrás del Peugeot 905. La segunda de las unidades está inspirada en el Toyota TS020 de los años 1998 y 1999, el segundo intento de Toyota de conquistar Le Mans en los años noventa.
Incluso hubo una versión de calle de este coche, llamada Toyota GT-One, de la que ya os hemos contado su historia en Diariomotor. El coche tiene muchas pegatinas de Toyota Motorsport y una decoración en colores rojo y blanco, de aspecto tan agresivo como japonés. Los TS020 rindieron de forma impecable en la fase de clasificación de las 24 Horas de Le Mans, pero fallaron en competición a causa de sus neumáticos. El consumo de combustible de su 3.6 V8 twin-turbo era también alto y en 1999 tuvieron que conformarse con el segundo puesto, a sólo una vuelta de distancia del BMW V12 LMR vencedor.
El último de este trío de Toyota GT 86 rinde homenaje al Toyota TS050 Hybrid, el actual contendiente de Toyota de cara a la competición de resistencia del máximo nivel. Este híbrido de altos vuelos se hizo con el segundo puesto en las 24 Horas de Le Mans de 2016, sin lograr más que un noveno puesto el año pasado, debido a problemas mecánicos. Todo apunta a que este año podrían alzarse con la corona. La decoración de Toyota Gazoo Racing y su esquema tricolor – negro, blanco y rojo – está muy presente en la carrocería del GT 86. Los tres coches fueron vinilados por el especialista inglés Funkee Fish.