Solo la propia Toyota podría crear un todoterreno que hiciera temblar al Land Cruiser. Un 4×4 cargado de tecnología y elementos que lo han hecho imbatible en todo tipo de terrenos peliagudos. Te presento a un monstruo pensado para las fuerzas japonesas de autodefensa que también se vendió al público y se llama Toyota Mega Cruiser.
Un encargo del gobierno japonés
Las JAF (Fuerzas Japonesas de Autodefensa) necesitaban un aparato con una serie de características para su nuevo vehículo militar multiusos. Una vez hecha la lista de la compra se dieron cuenta de a qué puerta debían llamar: La de Toyota.
Más de 2m de alto, igual que de ancho, tracción y dirección a las 4 ruedas, ejes sobreelevados, cotas offroad brillantes y un motor turbodiesel que no luce llamativos números pero dotado de la fiabilidad característica de este constructor. Indaguemos en su historia.
¿Hummer con insignia de Toyota?
Eludiendo si solo se inspiraron en el Hummer H1 del ejército americano (Humvee), los ingenieros desarrollaron un todoterreno altamente capaz. Toyota produjo 3.000 unidades para el ejército en diferentes versiones de transporte y combate como las que puedes ver en las fotos.
La edición de calle se vendió entre 1996 y 2002 en una tirada limitada a 149 unidades. Por si te lo estabas preguntando, no era un vehículo barato, pero la atención a sus dotes hizo que algunas unidades se vendieran fuera del país nipón.
Su motor era un 4.1 turbodiésel de 4 cilindros que desarrollaba 155CV a 3.200rpm. Algo poco llamativo hasta que nos paramos a pensar en la entrega de par motor. Concretamente 380Nm a solo 1.800rpm. Precisamente eso es lo que necesita un buen todoterreno, un motor que empuja desde abajo. Además, alta cilindrada unido a baja potencia suele resultar en una brillante fiabilidad y creo que Toyota sabe algo sobre el tema.
Características del Toyota Mega Cuiser
Era más grande que el mencionado Hummer con sus 5,09m de largo, 2,17m de ancho y 2,09m de alto. La distancia entre ejes de este bichaco eran 3,39m y gracias a su dirección 4WS podía establecer un diámetro de giro de solo 11,2m para 2.850kg de peso.
Peso que descansaba sobre unas enormes neumáticos de 37 pulgadas que podían modificar su presión desde un botón en la cabina. Estos tenían en su centro unas llantas de 17,5 pulgadas (medida un tanto rara) y se sujetaban a los ejes tipo pórtico que permitían una mayor altura libre al suelo (como los del Unimog).
Hablamos de 420mm desde el suelo hasta la zona más baja del coche. Esto junto con un ángulo de ataque de 49 grados, ángulo de salida de 45 y ángulo ventral de 33, permitía al Mega Cruiser «gatear» por casi cualquier superficie.
Precio y otros elementos reseñables
Costaba un poco menos que el famoso Lamborghini LM002 oscilando los 110.000€ y actualmente los pocos que se ponen a la venta giran entorno a ese precio dependiendo del estado. A pesar lo que nos indicaría su aspecto cuenta con suspensión independiente en lugar de ejes rígidos. El chasis es de largueros y travesaños y su caja de cambios era de convertidor de par, con 4 velocidades e iba asociada a una reductora. Los 3 diferenciales se podían bloquear de manera selectiva.
Podía alcanzar los 130km/h, con espacio para 6 personas y zona de carga de hasta 600kg, pudiendo entrar en ella bultos de hasta 2,05m de ancho. Si preguntas por el consumo, la respuesta es sí. No por nada eran necesarios 108 litros para llenar el depósito de combustible.
En resumen, hablamos de un portento que apareció ante el mundo hace casi 30 años con elementos que «iban a asegurar el resultado» unidos a otros que daban ese extra adicional necesario para convertirse en un producto espectacular. ¿Crees que debió fabricarse más?