Llevamos tiempo hablando de ello. Toyota quiere volver a conquistarnos. Toyota quiere recuperar a aquellos clientes que buscan algo más que un coche tecnológico y eficiente, un híbrido. Y para ello tienen un plan muy concreto, del cual ya os detallábamos 4 claves bastante evidentes, un plan para volver a emocionarnos. Tras el lanzamiento de un producto tan original como el Toyota C-HR, y su regreso al WRC, Toyota quiere dar un golpe en la mesa apostando por un utilitario venido a más, un deportivo muy compacto sobre la base del Toyota Yaris. Y ya sabemos su nombre, y un detalle muy importante, su motor. El Toyota Yaris GRMN será la versión deportiva del Yaris y contará con un motor de 1.8 litros de desplazamiento, más de 210 CV de potencia y una sorpresa, sobrealimentación por compresor.
Toyota Yaris
Así es como Toyota quiere redimirse por haber descuidado su gama deportiva en el espacio que más se la esperaba en Europa, en el de productos compactos y asequibles de corte deportivo. Porque, si bien es cierto que el Toyota GT 86 es uno de los deportivos que más nos ha gustado en los últimos años, está lejos de ser un producto deportivo para las masas. Con un precio que se antoja ajustado, el Toyota Yaris GRMN quiere añadir leña al fuego de los SEAT Ibiza Cupra, Volkswagen Polo GTI, Ford Fiesta ST, los Renault Clio RS, los Peugeot 208 GTI y compañía.
Y el hecho de haber apostado por una configuración inédita en el mercado, la del motor sobrealimentado por compresor, hace que este Toyota Yaris GRMN ya se haya ganado – como mínimo – toda nuestra atención.
El Toyota Yaris GRMN se presenta en el Salón de Ginebra junto con la renovación que atañe a toda la gama Toyota Yaris. Hasta ahora, Toyota vendía en Europa un 40% de todos los Yaris en su variante híbrida – el Yaris Hybrid. Mientras que en España la mitad de los Yaris que se venden son híbridos. Ver más información del Toyota Yaris 2017. Entre otras novedades, la renovada gama Yaris recibirá un nuevo motor 1.5 atmosférico en sustitución del antiguo motor 1.3, revirtiendo la tendencia del downsizing.
Para el más deportivo de los Yaris, para el Toyota Yaris GRMN, Toyota se había reservado una gran sorpresa. Su motor será un bloque de 1.8 litros de desplazamiento y más de 210 CV de potencia. Es potencia más que suficiente para plantar cara a sus rivales, e incluso algo más de lo que cabría esperar en un utilitario deportivo.
Y más allá de su fuerza bruta, nos congratula que Toyota haya optado por un motor en el que sus prestaciones no se consiguen a base de turbo, con sus pros y sus contras, como el lag, sino a base de compresor, que cuenta con la ventaja de no depender de la presión de los gases de escape y a priori debería ofrecer características tan deseables como una buena respuesta o un buen sonido. Recordándonos cómo Toyota sigue apostando por alternativas al turbo, que es el estándar en sus rivales. Recordemos que el SEAT Ibiza Cupra ya abandonó en 2015 su motor 1.4 TSI – que estaba sobrealimentado por turbo y compresor – para apostar por un 1.8 TSI de 192 CV y turbo.
Fuente: Toyota
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