Hoy se decidía el futuro de la planta de PSA en Zaragoza, en la planta de Figueruelas y es que tras pender de un hilo el proyecto de la fabricación de una nueva generación del Opel Corsa, hoy, finalmente, se ha llegado a un acuerdo entre los trabajadores y el grupo PSA que asegura la estabilidad de la planta, que seguirá fabricando el Opel Corsa como ha hecho desde que se inauguró en 1982.
La plantilla de Figueruelas ha aceptado el nuevo convenio
Tras la ruptura de las negociaciones entre los trabajadores y PSA al no aceptarse por parte de los sindicatos las condiciones de los nuevos convenios colectivos y un acercamiento que vaticinaba ya esta mañana el desenlace nos encontramos ahora con la aceptación por parte de los trabajadores de las nuevas condiciones, poniendo así fin, al menos por ahora, al conflicto.
Opel Corsa
Este acuerdo, que estará en vigor hasta finalizar 2022, propone medidas como la congelación del salario durante este año, una reducción de los descansos de 5 minuto y una bajada del 5% en los bonús de festividad y nocturnidad, además se plantea un rejuvenecimiento de la plantilla que nos dejará con próximas prejubilaciones incentivadas y salidas pactadas de empleados.
Además de los trabajadores de la propia planta dependen de Figueruelas unos 5.000 trabajos indirectos
Un empeoramiento de las condiciones laborales que sin embargo aleja a la planta de Figueruelas de un escenario mucho peor, que el proyecto del nuevo Opel Corsa no se asigne a esta planta y con ello se vislumbre el cierre de la planta y el fin de miles de empleos. Según apuntan desde la marca este nuevo acuerdo laboral era imprescindible para asegurar la asignación de futuros modelos y la llegada de nuevas inversiones que aseguren su capacidad productiva, su competitividad dentro del plantel de fábricas del grupo.
La planta de Zaragoza lleva operativa desde 1982 con cerca de 13 millones de coches producidos. En esta planta no sólo se produce el Opel Corsa, el Opel Mokkaa X y el Opel Crossland X o el Opel Meriva sino que también se produce, fruto de la adquisición por parte de PSA de Opel, el Citroën C3 Aircross, un modelo cuyo éxito bien podría insuflar algo de oxígeno a la planta.