Los aficionados a la marca sueca jamás nos recuperaremos, pero hemos de admitir que Saab no volverá. Nos queda el recuerdo de sus coches, especiales y cargados de personalidad, destrozados por el mercado y la burocracia maquinal de General Motors. Aunque llevamos ya casi ocho años sin Saab, quedan retales de su historia, y una última oportunidad para comprar un Saab. En apenas unas semanas será subastado el último Saab 9-3 fabricado, un Aero producido en 2014 bajo la tutela de NEVS. El último trozo de historia de Svenska Aeroplan Aktiebolaget.
Saab Automobile AB cerró sus puertas en diciembre de 2011, pero fue adquirida por NEVS, que transformaría a Saab en un fabricante de coches eléctricos. NEVS tuvo graves problemas económicos y sufrió una quiebra, tras la que perdió el derecho a usar el nombre de Saab, que conserva la división aeronáutica y militar aún en activo. Entre finales de 2013 y principios de 2014 la producción de los Saab 9-3 volvió a ponerse en marcha, para que NEVS-Saab tuviera los ingresos necesarios para su relanzamiento. Se produjeron apenas 420 coches.
Todos esos coches fueron vendidos y son piezas de coleccionista a día de hoy. El coche que tenéis en vuestras pantallas no fue vendido, ya que su destino era ser usado en un crash-test. Un crash-test que nunca llegó a producirse. El coche, producido a principios de 2014, permaneció casi cinco años almacenado. Ahora, es subastado por la nueva NEVS – participada por el gigantesco consorcio chino Evergrande – como gesto a los fans de la marca sueca. El coche en cuestión es un Saab 9-3 Aero, con carrocería de cinco puertas y pintado en un discreto Diamond Silver. Nos gustan los detalles en color azul de sus ópticas frontales.
Al tratarse de un acabado Aero, cuenta con unas bonitas llantas tipo turbina, de 18 pulgadas de diámetro y diseño deportivo. En su interior dispone de asientos de cuero deportivos, con una excelente sujeción del cuerpo y ajuste eléctrico. Pese a tener solo cinco años, su interior acusa el paso del tiempo en cuanto a diseño, pero no en cuanto a ergonomía, que sigue siendo impecable. El coche tiene solamente 66 km en su odómetro, realizados en la pista de pruebas de la fábrica de Trollhättan y durante su puesta a punto. El coche ha sido matriculado en 2019 y será vendido como prácticamente un coche de kilómetro cero.
Está equipado con un motor 2.0 turbo ECOTEC, un motor de 220 CV de potencia. Este motor transmite su potencia al tren delantero mediante un cambio automático de convertidor de par y seis relaciones. Aunque es un producto lanzado durante la era GM de Saab, es un coche muy especial, y será subastado por una cifra de dinero más que sana. Se espera que su precio final de venta oscile entre los 32.000 euros y los 41.000 euros, al tipo de cambio actual. Si quieres pujar por esta unidad, te dirigimos a Bilweb, la casa de subastas sueca que gestiona su venta.
