2024 será un año importante para la Unión Europea, por las decisiones que están por tomarse, por los comicios europeos y de ámbito nacional que definirán el Parlamento Europeo que tomará esas decisiones en los próximos cinco años.
El fin del diésel y la gasolina
Decisiones importantes que tendrán grandes repercusiones en el ámbito económico y social. Entre ellas, la prohibición de la combustión interna. De ella surgen grandes preguntas, ¿hasta cuándo podremos seguir comprando coches diésel, gasolina e híbridos nuevos? ¿Acudiremos a un concesionario y no nos encontraremos con más opciones que coches eléctricos? Y lo que es aún más importante, ¿cuánto costarán los coches eléctricos para entonces? ¿Qué haremos si no disponemos de garaje en el que recargar un coche eléctrico?
De momento nos centraremos en la pregunta que encabeza esta entrada. Y daremos una respuesta incompleta, que como veremos a continuación será importante matizar proporcionando una fecha inicial: 2035.
2035, el año de la prohibición de diésel y gasolina
Si tuviéramos que dar una fecha de momento no podríamos hacer otra cosa que hablar de 2035, el año que se ha propuesto la Unión Europea para que dejen de venderse coches diésel, gasolina, e híbridos nuevos. Tal y como está definida la hoja de ruta europea para entonces solo estará permitida la venta de coches nuevos eléctricos, ya sea empleando baterías, o hidrógeno.
En cualquier caso, es importante destacar que en los últimos meses han surgido voces que apuntaban:
- A la posibilidad de que se retrase esta fecha, algo poco probable, pero no imposible. Si nos atenemos a que el plazo de 2035 es la clave, alrededor de la cual gira todo el proceso de transición al eléctrico de la Unión Europea y a que los fabricantes de coches ya han tomado la decisión de dejar de vender coches con motor de combustión interna para entonces, o incluso antes.
- Una puerta abierta que permitirá la venta de coches con motor de combustión interna más allá de 2035, eso sí, utilizando combustibles neutrales. Aún no se ha definido del todo este apartado, pero probablemente se limite a coches de poco volumen, de nicho.
El fin del diésel y la gasolina antes de 2035
Por otro lado existe una posibilidad también muy real de que antes incluso de que lleguemos a 2035 no podremos comprar coches diésel, gasolina, e híbridos nuevos, sencillamente porque ya no los habrá disponibles en los concesionarios. Sabemos que algunos fabricantes están dispuestos a seguir vendiendo coches con motor de combustión interna mientras la legislación se lo permita. Pero si se mantienen unos objetivos de reducción de emisiones CO2 para las marcas ambiciosos, es probable que estos representen una parte cada vez mayor de su catálogo, se encarezcan, o incluso deban de emplear soluciones de electrificación – por ejemplo sistemas híbridos enchufables – que harán que sean tan caros como un coche eléctrico de baterías.
Algunas marcas ya han decidido ir más allá y antes de 2035, incluso de 2030, no tendrán más coches en sus concesionarios que aquellos que sean completamente eléctricos.
Al respecto de la segunda mano, de momento, no se ha propuesto ninguna fecha. Y no parece que vaya a existir una prohibición expresa de la venta de coches diésel, gasolina, e híbridos, de segunda mano, más allá de las restricciones que seguirán imponiéndose a los coches no eléctricos, por ejemplo para acceder a algunas ciudades, que harán que la combustión interna deje en muchos casos de ser viable.