Entre tanto eléctrico, híbrido y etiqueta medioambiental, muchas veces a un servidor le gusta dejarse llevar por la vibración al ralentí, el ronroneo y el agudo subir de vueltas de cualquier buen motor térmico con personalidad propia. A día de hoy, son pocos los coches que dejan de lado la eficiencia para darlo todo en el sentido emocional con un propulsor bajo su capó que que no tiene, necesariamente, que tener una gran cilindrada. Aun así, siempre quedará el mercado de segunda mano para quitarnos las penas.
Por esto último, a mi todavía corta edad (o eso quiero pensar) ya puedo decir que he disfrutado plenamente de dos motores históricos dentro del panorama europeo del automóvil: el seis en línea atmosférico de BMW en mi 530i (E39) y el mítico cinco cilindros de Volvo en mi S40 2.4i (sin turbo, eso sí). Dos coches que ya no tengo en mi garaje pero a los que he sumado una buena cantidad de kilómetros a su odómetro.
Ferrari 458 Italia
Se trata de dos propulsores que, por su carácter y lo que representaron en sus respectivas épocas, se han ganado su hueco en la historia del automóvil europeo, pero no son nada comparados con lo que representa el corazón del modelo que protagoniza el vídeo que navegando erráticamente por internet, he encontrado (voy perdiendo el foco conforme encuentro cosas que llaman mi atención).
Imágenes del Ferrari 458 Italia
Se trata del V8 que tuvo en sus entrañas el Ferrari 458 Italia, un propulsor que representa el final de una época dentro de Ferrari, y puede que también uno de los últimos coletazos de la que podemos empezar a considerar la edad dorada de la firma del cavallino. Con permiso del 458 Speciale que David Clavero tuvo la oportunidad de probar, es el último V8 atmosférico equipado en un Ferrari de producción, el punto y final a las berlinettas de motor central sin turboalimentación o hibridación.
Es por ello por lo que se trata de un Ferrari sumamente cotizado en el mercado de segunda mano: hay modelos de la firma mucho más nuevos, potentes, tecnológicos y con un uso mucho más comedido a sus espaldas que el 458, pero aquí manda la historia y lo que fue esta berlinetta para la marca en el momento de su lanzamiento, que se produjo en 2009.
Pero no estamos aquí para ver qué tal se cotiza, saber cuánto cuesta actualmente y desgranar qué tal compra es como coche de segunda mano como hacemos habitualmente en Diariomotor, sino para, simplemente, dejar que el agudo chillido de su V8 cortando a más de 9.000 RPM entre por nuestros oídos y se haga con nuestros nervios.
He aquí el documento en cuestión:
Es obra del youtuber NM2255, un habitual en el campo del spotting de coches raros y los vídeos de sonidos de coches, y se centra en el sistema de escape en forma de X fabricado por TFL Italy, un fabricante mas artesano que los típicos Akrapovic, Remus o Milltek que con su trabajo ha conseguido desatar más, si cabe, el chillido del V8 del 458 cuando sea acerca al corte de inyección.
El vídeo, en realidad, más allá de lo espectacular del sonido del 458 Italia y este sistema de escape, no tiene nada de especial en cuanto a su forma o ejecución. Se podría tomar como otro vídeo cualquiera de los muchos que hay en Youtube sobre un sistema de escape modificado con su respectiva lanzada en el banco de potencia y posterior prueba en calle para comprobar cómo suena y cómo funciona pero, cascos en la cabeza, ha conseguido que se me pongan los vellos de punta y que añore una época que ha pasado para, irremediablemente, no volver.