El Koenigsegg Regera no es un coche ni mucho menos convencional. Dejando a un lado el hecho de que su potencia es de 1.500 CV, su peculiaridad está en su caja de cambios – o mejor dicho, la ausencia de caja de cambios. Simplificando al extremo, el motor 5.0 V8 biturbo y su motor eléctrico están conectados directamente a un convertidor de par, encargado de transmitir la potencia al tren trasero, sin interrupciones ni cambios de marcha. El sistema Direct Drive del Koenigsegg Regera es peculiar, pero en este vídeo on-board os demostrará que es un auténtico portento de las altas prestaciones.
El vídeo ha sido grabado mientras el coche batía el récord mundial para una aceleración desde parado hasta los 400 km/h, seguida de una frenada hasta volver a detenerse. Una maniobra que el hiperdeportivo sueco completó en poco más de 30 segundos. Aunque el vídeo on-board está sobreexpuesto y no se ve correctamente la carretera, sí nos permite ver lo curiosas que resultan las fuertes aceleraciones con el sistema Direct Drive. Resultan curiosas porque el régimen del motor no va de la mano del incremento de velocidad, al igual que sucede en coches equipados con cambios de variador continuo.
El motor del Koenigsegg se mantiene a un régimen alto durante toda la aceleración, con un ligero incremento gradual del giro a medida que se acerca a su velocidad objetivo. Como se puede ver en la gráfica que acompaña al vídeo, la aceleración es muy lineal, sin interrupciones causadas por un cambio de marchas. La frenada es intensa y rapidísima, mucho más que la aceleración hasta los 400 km/h. Sobre el fascinante Koenigsegg Regera hemos publicado no pocos artículos, y cuando pensábamos que la marca sueca no iba a mostrarnos una innovación tan radical, llegó el Koenigsegg Jesko.
La principal peculiaridad del Koenigegg Jesko es que equipa una caja de cambios denominada LST (Light-Speed Transmission) con nueve relaciones… y siete embragues. Este cambio es capaz de saltar entre cualquier marcha en apenas 20 milisegundos, más rápido que cualquier cambio de convertidor de par o doble embrague. De esta manera, con solo pulsar un botón, el coche ofrece su máxima capacidad de aceleración – que con una potencia de 1.600 CV, no es precisamente poca. Lo que nos queda claro es que los chicos de Koenigsegg siguen asombrando al mundo con sus innovaciones, haciendo las cosas a su manera.
Galería de fotos del Koenigsegg Regera
