A finales de junio se celebró el London Concours 2022 y la sección ‘Coachbuilts and Concepts’ reunió a un conjunto de coches muy especiales. Entre ellos se encontraba el Mercedes F200 Imagination Concept de 1996, aquel prototipo que predijo muchas de las tecnologías que acabarían siendo una realidad. Sólo falló en una: el joystick que estaba destinado a sustituir al tradicional volante. Ahora, gracias al vídeo que acompaña a estas líneas, sabemos cómo funciona.
Conocimos al Mercedes F 200 Imagination en el Salón de París de 1996. Allí fue presentado como un elegante y lujoso coupé de dos puertas, que, como apuntábamos antes, adelantaba algunas de las tecnologías, sistemas y elementos que se convertirían en parte del equipamiento de serie que llevarían los vehículos del futuro. No tuvieron esa suerte sus famosos controles ‘by-wire’.
Sin volante, pero con joysticks
Mercedes reemplazó el tradicional volante por varios joysticks con los que el Mercedes F 200 Imagination podía girar, acelerar y frenar. Estaban situados en la consola central (donde iría la palanca del cambio) y en las dos puertas delanteras: sí, el copiloto también podía controlar el coche. Os invitaríamos a imaginar lo complejo que podría resultar conducir con este sistema, pero no hace falta: el canal de YouTube TheTFJJ lo ha captado.
Desde aquel Salón de París de 1996, rara vez han podido grabar al Mercedes F 200 Imagination… y menos en acción. Su presencia en el London Concours ha sido una extraña oportunidad de ver en directo a este inusual prototipo: sacar cualquier modelo de un camión portacoches con semejantes características es toda una prueba para los nervios del conductor que, en este caso, se complica al tener que manejarlo con los joysticks. Lo cierto es que el manejo es perfecto… excepto por una o dos paradas difíciles.
10 millones de dólares
Aseguran que este es uno de los pocos prototipos que Mercedes vendió a un cliente: ¿el precio? Es un misterio, pero los rumores apuntan a una cifra cercana a los 10 millones de dólares (9,84 millones de euros, según el cambio actual) para un coche que fue toda una predicción de futuro.
Sus faros bixenón con seis módulos de iluminación variable avanzaron la iluminación adaptativa actual, las puertas de apertura vertical acabaron llegando así como el techo solar electrocrómico. Su salpicadero lleno de pantallas nos recuerda a la actual Hyperscreen y las cámaras que sustituyeron a los tradicionales retrovisores ya no nos parecen tan raras: lo mismo sucede con la cámara de 360 grados.
El sistema para hacer llamadas manos libres está tan integrado como el reconocimiento de comandos de voz. Su suspensión ABC neumática, adaptativa y de dureza variable ya está presente en muchos modelos y aquellos novedosos airbags de cortina hace tiempo que forman parte del equipamiento de seguridad de los vehículos.
