Estos días llegaba hasta mi teléfono móvil un vídeo que, sinceramente, resulta chocante. Su protagonista un SUV deportivo de Mercedes-Benz. En el vídeo nos encontramos con un Mercedes-AMG GLE 63 Coupé que vuelca en una rotonda, a muy poca velocidad. Un vídeo doloroso en el que vemos cómo vuelca un coche de más de 140.000 euros, la versión más cara, potente y deportiva del Mercedes-AMG GLE 63 Coupé. ¿Pero qué ha sucedido para que se produzca tan absurda y costosa situación?
Mercedes-Benz Mercedes GLE Coupé
Investigando no tardé en comprobar que en Reddit ya estaban comentando esta historia, apuntando que este vídeo se habría grabado en las calles de Nantes en Francia.
Accidentes absurdos como el de este Mercedes son más comunes de lo que pensamos
En los últimos años me he encontrado por la calle muchos accidentes inexplicables, coches encaramados en una fuente, vehículos volcados en la intersección de dos calles, accidentes que cuesta imaginar cómo se han producido, especialmente en entornos urbanos en los que los límites de velocidad no parecen compatibles con que un coche reaccione volcando.
El error está en imaginar que podremos mantener el control del coche en cualquier situación y que sus reacciones serán predecibles. A eso hemos de añadir que en una ciudad existen tal cantidad de obstáculos que una situación de peligro, que en otras condiciones no hubiera supuesto más que un susto, puede conllevar un accidente de importancia, y vuelcos como el de este vídeo. Eso, unido a que las calles han de compartirse con peatones y ciclistas, hace que los límites de velocidad en las urbes sean tan bajos.
Chocar con una marquesina, un macetero, una señal, un semáforo, o un banco, a velocidades más bajas de lo que nos imaginamos, puede provocar que nuestro coche vuelque.
El vuelco del Mercedes-AMG GLE 63 Coupé
En el vídeo vemos cómo el conductor del Mercedes-AMG GLE 63 Coupé intenta hacer que ruja el motor del SUV que conduce, y quizás provocar que derrape, pero no se percata de que en un movimiento extremo como ese, la zona interior peraltada de la rotonda, y el bordillo, pueden ser más que suficientes para que las más de dos toneladas de Mercedes que lleva vuelquen y se produzca un accidente ridículo. De manera que, antes de sufrir un accidente absurdo como este, y acabar convirtiéndote en el viral del momento en internet, lo mejor es reflexionar y evitar riesgos innecesarios. El conductor de este SUV aún tuvo la suerte de que solo tendrá que lamentar los daños del coche que conducía. La situación hubiera sido peor si al perder el control hubiera chocado con otros coches, o incluso con algún peatón.
Más imágenes del Mercedes-AMG GLE 63 Coupé: