La llegada del Hyundai i30 N ha puesto patas arriba el mercado de los Hot Hatch, Hyundai no se ha tirado un farol y tal y como prometían su división de coches deportivos N lo tiene todo para plantar cara a modelos como el SEAT León Cupra, el Renault Mégane RS o el Peugeot 308 GTi. Pero ahora esa apuesta ha subido con el lanzamiento del Hyundai Veloster. Hyundai quiere convertirse en la reina de súper compactos con el Hyundai Veloster N, fabricando no sólo un coche más radical, sino dotándole de un sonido que no tiene rival entre sus competidores.
El Hyundai Veloster N y otros coches deportivos
Si hay algo que podemos criticar entre los más directos rivales de los Hyundai i30 N y Hyundai Veloster N es la falta de sonido en sus escapes, cuando no el uso de sintetizadores para emular el sonido a través del equipo de sonido. Las versiones más deportivas de los compactos del momento han conseguido poner el listón muy alto en el plano dinámico, pero el sonido se lo han dejado por el camino en muchos casos.
De este modo Hyundai ha decidido recuperar esa faceta tan echada de menos, poniendo especial énfasis en crear una melodía contundente y con mucha personalidad para el Hyundai Veloster N. Dado el planteamiento más deportivo del Veloster frente al i30, Hyundai ha planteado una configuración ligeramente más radical que la del compacto, lo que también implica una revisión del escape para acentuar su banda sonora.
¿Cómo suena el Hyundai Veloster N?
El resultado lo podéis comprobar por vosotros mismos. Hyundai ha confeccionado un escape que permite al propulsor 1.6 Turbo de 275 CV rugir en todo el régimen de revoluciones, regalando explosiones y petardeos varios en cada cambio y golpe de gas. Hyundai quiere que su división N sea un referente en este aspecto, recuperando esa idea de coche deportivo de verdad, usable en el día a día también, pero donde la deportividad sea principal protagonista, incluso en el sonido de escape.
Veloster N frente a Mégane RS y 308 GTi
El Hyundai Veloster N pretende subir un peldaño más con respecto al Hyundai i30 N, lo que significa que pese a una potencia de 275 CV que quizá lo dejan algo descolgado con respecto a la marca de 300 CV que se ha impuesto en el segmento, sí pretende ofrecer un carácter mucho más deportivo que sus rivales. En su nivel de potencia son los Peugeot 308 GTi y el Renault Mégane RS los rivales más directos, empleando mecánicas de menos de dos litros turboalimentadas y con una puesta a punto que permite licencias en circuito. Por encima encontraríamos a modelos como el SEAT León Cupra o el Honda Civic Type-R, modelos más potentes, aunque no necesariamente más deportivos a tenor de las promesas de Hyundadi.
