Como sabéis, fabricantes como Volkswagen cuentan con gamas de producto sustancialmente diferentes según regiones. Es el caso de Volkswagen en Estados Unidos, que es asociada con una imagen mucho más generalista y asequible, con respecto a su imagen en Europa. En Estados Unidos se venden coches como el Volkswagen Jetta, un Volkswagen Passat específico para dicho mercado e incluso un gran SUV llamado Volkswagen Atlas. En vez de vender un caro Volkswagen Touareg, ofrecen un coche más sencillo y asequible, cuya nueva versión Cross Sport acaba de ser presentada. Así es el «Audi Q8 low-cost» de Volkswagen.
El Volkswagen Atlas está construido sobre la plataforma modular MQB, y en su versión estándar es un coche de hasta siete plazas, con una estética cuadriculada y funcional. No va a ganar premios por su diseño, los quiere ganar por su espacio y practicidad. Sin embargo, algunos clientes echaban de menos una estética más cuidada para el Volkswagen Atlas, algo que ha venido a solucionar la versión Cross Sport. Además, han aprovechado su lanzamiento para dar a la gama del Atlas un ligero lavado de cara, centrado especialmente en torno a una nueva calandra y ópticas, de mayores dimensiones.
El nuevo Atlas Cross Sport es 71 mm más corto que el Volkswagen Atlas, pero sigue siendo un coche grande, de casi cinco metros de longitud. Es 58 mm más bajo que el Atlas convencional y el techo cae de forma ostensible a partir del pilar B, confiriendo a su zaga un diseño mucho más dinámico e interesante. La caída del portón trasero asemeja su zaga a la de coches como el Audi Q8, salvando las obvias diferencias. En la versión R Line mostrada llaman la atención los agresivos paragolpes, así como las llantas de hasta 21 pulgadas – ha sido el primer coche en estrenar el nuevo logotipo «R» de la marca.
El lavado de cara interior es mucho más ligero, y se queda en poco más que un nuevo volante. No obstante, han trabajado en mejorar algunos tapizados y en dar más empaque a un habitáculo en el que la sencillez prima por encima del efectismo. Con todo, cuenta con instrumentación digital y estrena tecnologías como la carga inal´mabrica para teléfonos móviles. A través de la app Car-Net podemos acceder a ciertas funciones del coche, como su localización o su nivel de combustible, e incluso podremos arrancarlo o encender sus luces de forma remota. El coche es un punto WiFi rodante al que se pueden conectar hasta cuatro dispositivos.
Mecánicamente, el Volkswagen Atlas Cross Sport está disponible con un 2.0 TSI de 238 CV de potencia y un 3.6 VR6 atmosférico con 280 CV de potencia – sí, un VR6, lo has leído bien. Ambos motores se asocian a un cambio automático de ocho relaciones y convertidor de par, y están disponibles de forma opcional con un sistema 4Motion de tracción total. El VOlkswagen Atlas Cross Sport no se venderá en Europa, se limitará a Asia y mercados selectos del continente americano.
