La frase «El cliente siempre tiene la razón» es un lema comercial que surgió a finales del siglo XIX en los Estados Unidos. Fue popularizada por el empresario Harry Gordon Selfridge, quien fundó la tienda departamental Selfridges en Londres en 1909. La idea con esta política de ventas era que si los clientes se sentían satisfechos con el servicio y la atención que recibían en la tienda, serían más propensos a volver y a recomendar la tienda a otras personas.
Volkswagen se está tomando esta frase al pie de la letra incorporando las opiniones de los clientes a sus diseños. Han recibido críticas por sus pantallas táctiles y superficies sensibles al tacto, y como resultado, están trayendo de vuelta los botones reales a la cabina de sus coches. Mientras tanto, los conductores de Volkswagen tendrán que conformarse con los mandos deslizantes en el lavado de cara del Volkswagen ID.3, y el Tiguan también carece de mandos.
Sin embargo, se han eliminado los elementos más criticados y se ha instalado un nuevo mando giratorio en la consola central para acceder rápidamente a los ajustes de modo de conducción y volumen. En general, Volkswagen está escuchando a sus clientes y realizando cambios basados en sus comentarios.
Volkswagen toma nota y está cambiando el interior de sus coches
El jefe de la marca Volkswagen, Thomas Schäfer, ha respondido a las críticas de los clientes analizando sistemáticamente las funciones que un cliente suele utilizar con asiduidad en sus coches. Schäfer cree que el concepto de interior introducido por su predecesor, Herbert Diess, había causado mucho daño a la marca Volkswagen, esto habría generado mucha frustración dentro de sus usuarios.
Para solucionar este problema, Schäfer y su equipo hicieron un análisis para ver todas las funciones y ordenarlas por nivel de importancia y determinaron cuáles debían ser botones, cuáles debían mostrarse en la pantalla y dónde debían estar situadas. También analizaron hacia dónde se dirigen intuitivamente los clientes cuando quieren encender la luz, entre otras cosas.
Con estas acciones Volkswagen espera mejorar la experiencia del cliente y resolver las preocupaciones que se han planteado. Thomas Schäfer quiere estar seguro de que una vez encuentren un enfoque que funcione para su concepto de interior en sus coches lo optimicen de la mejor manera para no confundir a sus usuarios cambiando demasiado el interior en cada nuevo modelo que salga.
Además, espera que el nuevo diseño que creen sea similar en toda la gama de modelos de la marca facilitando el uso y comprensión por parte de sus usuarios. Se puede concluir que lo que quiere Volkswagen es optimizar sus diseños y mantener una línea coherente en todos los sentidos y también respetando el feedback con sus compradores.
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