Volkswagen ha previsto un futuro en el que los robots habrán sustituido muchas tareas que hasta ahora realizan operarios humanos en las fábricas. Tareas repetitivas, pero a menudo de precisión, que hasta ahora exigen la habilidad de un operario y que muy pronto podrían realizar brazos robóticos. Esto dibuja un panorama, como mínimo, preocupante para los trabajadores, pero también emocionante para los que tengan un mínimo de interés en los avances de la ingeniería. Ahora bien, ¿cómo aprenderán los robots a moverse como humanos? Volkswagen tiene la respuesta, y es esta chaqueta.
Volkswagen y el aprendizaje de los robots
Volkswagen ha iniciado una colaboración en Dresden, en su famosa Fábrica de Cristal, con una start-up local llamada Wandelbots, y dedicada a la programación y el aprendizaje de los robots.
Mirando hacia el futuro, no hay que ser un visionario para entender que será necesario instruir a los robots, y conseguir que estos lleven a cabo movimientos y maniobras que hasta ahora hacían los operarios en las fábricas. Y ese es precisamente el objetivo que tiene la chaqueta que han desarrollado con Wandelbots, acelerar la digitalización de los movimientos de los operarios para que, por imitación, los robots sean capaces de replicarlos.
La chaqueta de Wandelbots y Volkswagen
La chaqueta que ya están utilizando y probando Wandelbots y Volkswagen en la fábrica de Dresden, cuenta con sensores que son capaces de digitalizar con bastante precisión los movimientos que realiza un operario, por ejemplo para ajustar los paneles de una puerta, o la tornillería.
Al quedar registrados esos movimientos, el brazo robótico es capaz de repetirlos, insistimos, por imitación, con tanta rapidez y precisión como el mejor operario. Y lo que es más importante, en el momento en que un brazo robótico ha aprendido a realizar esta tarea, instruir a decenas, cientos, o miles de robots, para realizar esa misma tarea, es tan sencillo como introducir unas líneas de código en su software.