Volkswagen nunca se ha caracterizado por poner en las calles creaciones demasiado radicales o salvaje, sin embargo de tanto en tanto, Volkswagen sí que gusta de dar luz verde a ciertos proyectos internos con los que llevar al límite a sus coches, dejar disfrutar a sus trabajadores y crear prototipos de esos que hacen historia. Y precisamente esta es el relato que se esconde sobre la que hasta ahora se consideraba como una leyenda urbana, pues hubo un día en el que Volkswagen pensó que sería buena idea fabricar un Golf 6 con un motor VR6 potenciado hasta los 469 CV.
El Golf VR6 que podía humillar a todo un Lamborghini
Tenemos que remontarnos a 2009 para conocer el origen de esta historia, pues fue entonces cuando un grupo de trabajadores de la marca se propuso crear un último homenaje al motor VR6. Este propulsor de 6 cilindros, tan ligado a la marca alemana, desapareció oficialmente de la gama Golf con el cese de la quinta generación, despidiéndose en teoría con una versión de 3,2 litros cilindrada, un sonido realmente embriagador y una potencia máxima de 250 CV.
Volkswagen Golf
Pues bien, el final de esta historia tuvo una segunda parte, pues internamente, y ya empleando la sexta generación del Golf, se dio luz verde al desarrollo de una unidad en la que se llevase al límite a esta mecánica y al coche en sí mismo.
El trabajo de rediseño del motor 3,2 VR6 fue realmente profundo y se realizó en colaboración con Rothe Motorsport, introduciendo turbocompresores Garrett GT35, nuevos pistones, cigüeñal reforzado, nuevos conductos de admisión y escape, intercooler, mejoras en el sistema de refrigeración, inyectores de mayor caudal, ECU personalizada, nuevos árboles de levas, válvulas, etc. Hablamos de una reconstrucción y rediseño de tal calibre, que el motor VR6 pasaba de 250 CV a nada menos que 469 CV.
A nivel de transmisión también se hicieron mejoras, pero manteniendo eso sí la caja de cambios DSG de 6 relaciones y el sistema de tracción total con diferencial central Haldex, todo ello con el objetivo de gobernar la nueva caballería cuando se pisaba el acelerador a fondo.
Todo ello por supuesto se complementó con otras mejoras en el chasis como fue la instalación de una suspensión Bilstein B16, así como los frenos de un Audi RS6 y las llantas de un Lamborghini Gallardo calzadas con neumáticos de altas prestaciones. ¿Lo mejor de todo? Pese a la reconstrucción del motor y las mejoras en el chasis, el peso final del conjunto apenas rondaba los 1.000 Kg.
Curiosamente, y salvando las distancias con respecto a otros muchos prototipos creados sobre el Golf, este Golf 6 VR6 mantiene un interior de lo más convencional sin ningún cambio en asientos, instrumentación o similares, siendo un coche que pasaría totalmente desapercibido si sólo nos fijásemos en el habitáculo.
Ahora este prototipo ha visto la luz dado que va a convertirse en uno de los protagonistas del GTI Fanfest 2024 que se celebrará en Wolfsburgo, Alemania, del 26 al 28 de julio. Hablamos de un coche totalmente funcional y que es propiedad de la división de coches históricos de la marca, Volkswagen Classic.
Fuente: Motor1