El nuevo Golf GTI Clubsport ha sido desvelado, correspondiente a la octava generación del compacto de la firma de Wolfsburgo y perfilándose como uno de los modelos con más sensaciones de Volkswagen para plantar cara a los hot hatch más deportivos del momento, como el Honda Civic Type-R o el futuro CUPRA León. Así, este GTI Clubsport de 300 CV se sitúa entre el comedido GTI de 245 CV y el próximo Golf R, contando con una puesta a punto pensada para ser usada en un día de circuitos o un domingo por la mañana en tu puerto de montaña favorito.
GTI Clubsport: con 300 CV y diferencial electromecánico
Bajo el capó de esta nueva versión se esconde el conocido 2.0 TSI EA888, un propulsor turboalimentado de gasolina de cuatro cilindros que en esta ocasión rinde 300 CV de potencia y 400 Nm de par motor, y que para conseguirlos, Volkswagen lo ha dotado respecto del GTI convencional de un intercooler de mayor tamaño, un nuevo turbocompresor y una centralita recalibrada. Además, la caja de cambios automática DSG de doble embrague y 7 velocidades cuenta ahora con unas relaciones un poco más cerradas, enviando el par al eje delantero a través de un diferencial electromecánico de desplazamiento limitado (VAQ) controlado electrónicamente. Con todo ello consigue firmar un 0 a 100 km/h en sólo 6 segundos y una velocidad máxima limitada electrónicamente a 250 km/h.
Volkswagen Golf
Asimismo, también cuenta con una nueva geometría de suspensiones y una altura rebajada en 15 mm, además de una dirección más progresiva y directa, una suspensión adaptativa DCC recalibrada, así como un ABS y ESP menos intrusivos, con la posibilidad de desconectar esta última ayuda electrónica. Además, y como curiosidad, su puesta a punto se ha llevado a cabo en el famoso trazado alemán de Nürburgring, donde ha conseguido un tiempo de 7 minutos y 54 segundos.
Sutiles cambios estéticos respecto al GTI convencional
A nivel estético resulta muy similar a un GTI convencional, adoptando algunas soluciones del mismo como el denominado Face Light, una franja horizontal iluminada que conecta ambas ópticas delanteras, o los diversos detalles en color rojo repartidos a lo largo de su carrocería. No obstante, cuenta con un paragolpes delantero rediseñado con una estética más agresiva, al igual que los faldones laterales o el difusor trasero, que ahora aloja unas salidas de escape circulares de mayor tamaño. Así, el toque más diferenciador lo pone el alerón trasero en color negro brillo en dos alturas que corona su caga.
En cuanto al interior, los cambios son aún más sutiles, añadiendo de serie con elementos como el Digital Cockpit, el sistema multimedia con navegador, cargador inalámbrico y los pedales de acero inoxidable, además de una tapicería ArtVelours con pespuntes de color rojo, disponible en cuero de forma opcional. Por el momento no se ha dado a conocer el precio ni disponibilidad, teniendo como referencia con los 42.290 € del GTI 2.0 TSI 245 CV con cambio automático DSG-7.
