La apuesta del Grupo Volkswagen por el GNC (gas natural comprimido) es más que evidente, una opción bifuel, como lo es el GLP, que promete un menor coste por kilómetro gracias a un precio más reducido del combustible y las ventajas de contar con la etiqueta ECO, pero con la contrapartida de un mayor precio de adquisición y una red de gasolineras con surtidores de GNC aún más reducida que las de GLP. No obstante, y como hemos dicho, la apuesta de la gente de Wolfsburgo es firme, tal y lo demostraron los primeros SEAT TGI con este combustible, el cual ha llegado incluso a su firma premium con el Audi A4 Avant g-tron.
Volkswagen Golf
Promete un ahorro económico del 40 % en combustible
Así pues, Volkswagen ha anunciado que de forma inminente comercializará un versión GNC de su nuevo compacto, el Golf TGI, el cual contará con un depósito de gas natural de 17,3 kg (115 litros) acompañado de otro de 9 litros de gasolina para casos de emergencia, asegurando los alemanes que alcanzará una autonomía de unos 400 km según el ciclo WLTP.
Para esta versión han partido del conocido 1.5 TSI, un propulsor gasolina con turbo de geometría variable y funcionamiento bajo ciclo Miller, con una destacada relación de compresión de 12,5:1 (en líneas generales los motores gasolina «más mundanos» están sobre los 10:1, siendo la relación de compresión un parámetro clave en el rendimiento termodinámico del propulsor), desarrollando una potencia de 130 CV y 200 Nm de par motor y recurriendo, en principio, a un cambio manual de 6 relaciones.
Respecto a su economía de uso y respeto al medio ambiente, dos de los argumentos clave para el desarrollo y comercialización de estas versiones, firma un consumo de unos 4,2 kg de gas natural a los 100 km, y teniendo en cuenta que el precio de este combustible ronda los 0,9 €/kg, el coste de recorrer esos 100 km será de 3,78 €, por los 6,48 € del 1.5 TSI 130 CV, es decir, supone un ahorro de aproximadamente un 40 %. En cuanto a su «carácter verde», además de emitir menos cantidad de NOx, su huella de carbono se estima que es en torno a un 25 % menor respecto a su homólogo de gasolina, aunque lo más interesante de todo es el el hecho de poder repostar biometano obtenido a partir de residuos vegetales, lodos de aguas residuales o cualquier otro tipo residuo orgánico, ya sea doméstico o industrial.
Así pues, como principales rivales de este Golf TGI nos encontraremos con el nuevo León, que está a la espera de recibir esta motorización, la cual se comercializa actualmente en la generación saliente del compacto español, o el también nuevo Skoda Octavia 1.5 TSI G-TEC 130 CV que está por llegar.