Durante los segundos que has tardado en leer el inicio de este artículo, se ha vendido un Volkswagen Golf: dicen que cada 41 segundos se comercializa uno. No es de extrañar, por tanto, que, en una situación normal, se matriculen 780.000 unidades. Hablamos del modelo más exitoso de Volkswagen, que se ha convertido en el más popular en numerosos mercados y allí donde no lo es, ocupa las posiciones más altas en las listas. Todo esto no parece suficiente para asegurar su continuidad: el Volkswagen Golf parece tener los días contados.
Thomas Schäfer, CEO de Volkswagen desde el pasado mes de abril, ha concedido una entrevista al periódico alemán Welt y ha desvelado que todavía no han tomado una decisión sobre el desarrollo de la novena generación. Admitió que están trabajando en un lavado de cara para el actual Volkswagen Golf, pero dijo que el destino del popular modelo se decidirá en los próximos doce meses.
“Tendremos que ver si vale la pena”
Volkswagen Golf
Y sus palabras no fueron demasiado esperanzadoras para el compacto: “Tendremos que ver si vale la pena desarrollar un nuevo vehículo que no vaya a durar siete u ocho años completos”. Un proceso que, según sus palabras, sería “extremadamente caro”. Unas declaraciones que contrastan con el anuncio que Volkswagen hizo en marzo de 2021 cuando confirmó la llegada de nuevas generaciones para el Golf (también para T-Roc, Tiguan y Passat) antes de que la marca sea completamente eléctrica.
Thomas Schäfer explicaba ese “tendremos que ver si vale la pena” aludiendo a los que costará un coche con la llegada de la nueva normativa de emisiones Euro 7. Según sus cálculos, se espera que los precios aumenten entre 3.000 y 5.000 euros porque necesitarán sistemas más sofisticados para conseguir esa homologación: “Con un vehículo pequeño, es difícil compensar estos costes adicionales. Por lo tanto, la movilidad de nivel de entrada con motores de combustión será significativamente más cara”.
Añade, además, que, en Europa, se acerca el fin de los modelos con precios en torno a los 10.000 euros porque hacer que los motores de combustión cumplan con una legislación cada vez más estricta, en lo que a emisiones se refiere también, aumentará los costes de desarrollo.
¿Hasta 2027 o 2028?
La actual generación (MK8) del Volkswagen Golf se presentó en 2019 y está basada en la última versión de la plataforma modular MQB. Esto significa que si ese lavado de cara confirmado por la marca llega en 2023 o 2024, el ciclo de vida del compacto alemán podría extenderse hasta 2027 o 2028. Un par de años antes de la fecha elegida por la Unión Europea (2030) para que en el Viejo Continente sólo se vendan coches eléctricos.
Para entonces, se espera que los vehículos de baterías sean significativamente más baratos que hoy en día. Esto podría hacer que las alternativas impulsadas por motores de combustión se quedaran obsoletas.
El Volkswagen ID.2 e ID.3
El CEO de Volkswagen cree que la solución a todos los problemas de costes y de cumplimiento con la normativa reside en los vehículos eléctricos. No en vano, la marca ya está trabajando en cuatro modelos de este tipo que, según sus palabras, serán realmente asequibles. Con 2025 como fecha clave, se espera el lanzamiento del Volkswagen ID.2 con una autonomía de 350-400 kilómetros y un precio inferior a los 25.000 euros: una cifra que le acercará a lo que vale un Volkswagen Golf con las especificaciones habituales.
Con la presencia del Volkswagen ID.2 y del Volkswagen ID.3, la marca de Wolfsburgo podría estar, prácticamente, obligada a descontinuar el Volkswagen Golf ya que tendría dos reemplazos indirectos para él. Uno y otro serían, en principio más baratos (en desarrollo, producción y venta) y cumplirían con todas las normativas europeas que están por llegar.
Si Volkswagen decide eliminar el Volkswagen Golf, seremos testigos del final de una era que arrancó en 1974 para escribir la historia del compacto más vendido del mundo (35 millones de unidades en 2019 cuando cumplió 45 años). Los alemanes han demostrado que no les tiembla la mano a la hora de tomar estas decisiones, el Volkswagen Beetle es un buen ejemplo de ello, pero cuesta (mucho) imaginar un mundo del motor sin un modelo tan icónico como el Volkswagen Golf.
