Aunque Volkswagen prácticamente solo hable de coches eléctricos en futuro, para anticiparnos una nueva generación de eléctricos con grandes autonomías y la aspiración de entrar en la lucha que muchas marcas quieren librar con Tesla, y sus productos más económicos, no podemos olvidarnos de que en su gama ya cuentan con productos como el Volkswagen Golf eléctrico, o e-Golf, que ha visto como su demanda crecía tanto que será necesario duplicar su producción. Cada vez hay más clientes que buscan un Volkswagen Golf eléctrico frente a alternativas tan sólidas como el Nissan Leaf, ¿pero por qué ahora?
El Volkswagen Golf más eficiente es eléctrico, el e-Golf
Por 38.020 euros, precio de tarifa, es posible adquirir un Volkswagen e-Golf en España, un coche eléctrico que se anuncia con unos 300 kilómetros de autonomía y toda la tecnología presente en la última actualización del Volkswagen Golf. Un coche que cuenta con un motor eléctrico de 136 CV de potencia, y una gama simplificada a una línea de acabado y equipamiento, de manera que las posibilidades de configuración se limitan a algunos colores de carrocería y, obviamente, algunos extras opcionales.
Volkswagen Golf
Pero con rivales tan sólidos como el Nissan Leaf, o el Renault Zoe, y en un momento en que el coche eléctrico apenas ha comenzado a despegar, podría decirse que sus ventas en la mayoría de los mercados internacionales – y salvo alguna excepción – han sido casi testimoniales y el e-Golf estaba llamado a pasar con más pena que gloria por los concesionarios.
Pero, curiosamente, las ventas del Volkswagen Golf eléctrico han repuntado, cuatro años después de su presentación. Y tanto ha aumentado la demanda de el e-Golf que Volkswagen ha decidido incorporar un segundo turno a la línea encargada de su producción, de manera que la capacidad actual de producir 35 coches diarios se doblará, hasta los 70 coches diarios.
Recordemos que el Volkswagen e-Golf se fabrica en la Gläserne Manufaktur de Dresden, la factoría que en su día se encargó de producir el Volkswagen más opulento, y un fracaso que se erige como el mejor ejemplo del rumbo decadente que siguió la marca hasta la crisis de los diésel, para corregirlo, reconvertirse, y transformar aquel edificio icónico en el centro neurálgico de su nueva estrategia para el coche eléctrico.
El repunte de las ventas, y la necesidad de doblar la producción, no es casual. Se debe al incremento de la demanda que se ha producido en Alemania con la introducción de importantes incentivos para el coche eléctrico. Y de hecho son precisamente ese tipo de incentivos, y la gran acogida que ha tenido durante los últimos años el coche eléctrico en mercados como Noruega, los que han mantenido las ventas del e-Golf durante todos estos años. De hecho, tras su lanzamiento, el e-Golf se convirtió en uno de los productos estrella del mercado noruego, que copó la mayoría de las ventas de este modelo.
Más imágenes del Volkswagen Golf eléctrico e híbrido: