Definición de locura: dícese de algo extraordinario, fuera de lo común. No todos los días nos encontraremos con un compacto con doce cilindros y nada más y nada menos que 650 CV de potencia. Pero hace diez años Volkswagen lo hizo. En 2007 se presentaba el Volkswagen Golf GTI W12, un prototipo – en palabras de Volkswagen era un estudio de diseño – con el que acudirían al festival más importante de amantes de los GTI, el Wörthersee austriaco. Aquella locura había llevado al Volkswagen Golf hasta los 650 CV de potencia, transformándolo literalmente en un auténtico superdeportivo, que incluso contaba con solo dos plazas y un motor en posición central, justo por delante del eje trasero. Mucho más de lo que jamás hayamos visto, desde entonces, en un Volkswagen Golf GTI o un Volkswagen Golf R. ¿Cómo acabó ese proyecto? ¿Qué ha sucedido con el Volkswagen Golf GTI desde entonces?
Aunque el responsable de su diseño, Marc Lichte, soñara en aquellos días con que algún día viéramos en la calle un Volkswagen Golf GTI con este aspecto, el proyecto nunca prosperó (ver prueba de la revista británica EVO). La idea de un Volkswagen Golf GTI con motor W12 tal vez fuera demasiado atrevida, pero la de transformar a un compacto de motor delantero y tracción delantera, en un deportivo de motor central, no hubiera sido un acontecimiento inédito. Basta recordar aquellos añorados y cotizados Renault Clio V6.
Volkswagen Golf
El Volkswagen Golf GTI W12 era un compacto radicalizado con respecto al Golf GTI que se comercializaba en aquellos años. Una bestia con 450 CV de potencia más, 7 centímetros más bajo, 16 centímetros más ancho y capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos y alcanzar los 323 km/h. Registros superiores a los de un Ferrari F430, el Ferrari por excelencia de la época.
En su transformación, Volkswagen emplearía el motor de doce cilindros en uve doble de Bentley, la caja de cambios del Volkswagen Phaeton, los frenos delanteros del Audi RS4 y los traseros del Lamborghini Gallardo, sobre la plataforma de un Volkswagen Golf.
Ningún Volkswagen Golf de producción, desde entonces, se ha acercado – ni mucho menos – a esas cifras. Aunque desde entonces sí hemos visto cómo la gama más deportiva del Volkswagen Golf iba aumentando, con un Volkswagen Golf R que ya llega a los 310 CV de potencia, y con un Volkswagen Golf GTI con una gama más completa que nunca. El nuevo Golf GTI ya llega a 230 CV, y el GTI Performance a 245 CV, pero también hemos visto sendas versiones Golf GTI Clubsport y Golf GTI Clubsport S con 265 CV y 310 CV de potencia respectivamente.
Quedará para el recuerdo aquel prototipo, como también otros estudios de Volkswagen Golf potentes y radicales, como el Golf R 400 de 2014, o el Golf Design Vision GTI de 2013 con motor V6 y cerca de 500 CV de potencia.
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