En Estados Unidos, con motivo del Salón de Chicago, acaba de presentarse el nuevo Volkswagen Jetta GLI. El Jetta GLI es la versión más deportiva del Volkswagen Jetta, la berlina compacta que ha comenzado a venderse en el mercado estadounidense hace unos meses. Aunque tiene una orientación marcadamente asequible, los GLI añaden a la ecuación 230 CV de potencia y un chasis deportivo, además de una estética mucho más interesante y agresiva. En este artículo os vamos a contar todo lo que sabemos del nuevo Volkswagen Jetta GLI 2019, lo más parecido a un Volkswagen Golf GTI de cuatro puertas.
A nivel estético, el Volkswagen Jetta GLI lleva un kit de carrocería específico. La calandra tiene acentos en color rojo, una rejilla más deportiva y el logotipo «GLI» visible en color rojo. Unas nuevas taloneras y unas llantas de 18 pulgadas de diámetro contribuyen a crear un perfil lateral más agresivo, mientras que en la zaga dos colas de escape, una imitación de difusor y un discreto spoiler nos dejan ver que no estamos ante un Volkswagen Jetta cualquiera. La suspensión del coche se ha rebajado en 15 mm, gracias a la instalación de una nueva suspensión con puesta a punto deportiva.
Volkswagen Jetta
En el interior del coche también se percibe una atmósfera más deportiva. Los asientos deportivos sujetan mejor el cuerpo de los ocupantes. El conductor tiene ante sí una instrumentación digital Virtual Cockpit de 10,25″ y el mismo volante del Volkswagen Golf GTI. Los pedales de aluminio y la iluminación ambiental personalizable también contribuyen a sumergirnos más en esta atmósfera dinámica. A nivel técnico, todos los Volkswagen Jetta están construidos sobre la plataforma MQB del Grupo Volkswagen, y estos GLI no son una excepción. Su motor es un 2.0 TSI, un motor turbo de gasolina y cuatro cilindros.
Este motor desarrolla 230 CV de potencia – los mismos que el Volkswagen Golf GTI – y envía toda su potencia al tren delantera. El Jetta GLI se venderá de serie con una caja de cambios manual de seis relaciones, aunque habrá una caja de cambios DSG de doble embrague y siete relaciones como equipamiento opcional. Otro cambio a destacar con respecto a otros Volkswagen Jetta es el abandono del puente rígido trasero a favor de un esquema de suspensión trasera multibrazo – un esquema independiente que mejora el paso por curva del coche.
El equipo de frenado está «prestado» del Volkswagen Golf R y en el tren delantero monta discos de freno ventilados de 340 mm de diámetro. Del Golf más deportivo también recibe el «diferencial autoblocante», o mejor dicho, la simulación electrónica de autoblocante – el sistema frena la rueda interior delantera en curvas cerradas, simulando la presencia de un diferencial de deslizamiento limitado físico. El Volkswagen Jetta no se vende en Europa, y no está prevista su llegada en un futuro. Lo mismo ocurrirá con el Volkswagen Jetta GLI, por mucho que nos apene.