Suenan rumores que hablan de que Volkswagen podría estar planeando la venta de Ducati, en manos del grupo alemán desde 2012. Esta venta podría estar aparentemente propiciada por el Dieselgate, sirviéndole a Volkswagen para apoyar económicamente la reestructuración interna de la marca tras el escándalo de las emisiones y la verdad es que, se venda o no, estos rumores sobre la venta de la firma de motos italiana nos ha hecho rememorar un lanzamiento que nos conquistó allá por 2014: el Volkswagen XL Sport.
Por ahora ni desde Volkswagen, ni desde Audi, ni desde Ducati se han pronunciado de manera oficial sobre la posible venta de la marca de motos
El Volkswagen XL Sport era una sugerente visión del eficiente Volkswagen XL1 que tristemente, a diferencia de su hermano más “ECO”, no llegó a las calles. La idea comercialmente hablando no pintaba demasiado bien claro, habría sido imposible justificar con unas tímidas cifras de ventas semejante deportivo pero en aquella mañana en el Salón de París de 2014 todos soñamos con una Volkswagen luchando contra la lógica para lanzarlo como modelo de producción.
Pero… ¿qué pinta Ducati en todo esto?
En el Salón de París de 2014 Volkswagen nos sorprendió con un ligero deportivo (sólo 890 kg) que contaba con un motor Ducati de 200 cv
Aquel Volkswagen XL Sport nos sugería la interesante unión de un liviano chasis monocasco de CFRP (polímeros reforzados con fibra de carbono) con una mecánica de origen Ducati, un propulsor bicilíndrico de 1.199cc que, como imaginarás, estaba heredado de la espectacular Ducati 199 Panigale superleggera materializando así en un producto la compra por parte del grupo Volkswagen (Audi mediante) de Ducati.
Este propulsor desarrollaba 200 caballos a, redoble de tambores, 11.000 rpm quedando en manos de una caja de cambios DSG y dispuesto en la parte posterior / central de ese mencionado chasis monocasco.
A diferencia del Volkswagen XL1 (con motor diésel) el XL Sport no llegó a las calles:
El XL Sport se conformaba con sólo 890 kg, era capaz de hacer un 0 a 100 km/h en 5.7 segundos y su velocidad máxima era de 270 km/h.
¿Y qué decir de su diseño? Era espectacular y hubiera sido una genial alternativa (imaginamos que algo más cara…) al Alfa Romeo 4C, con un diseño más futurista, con esas puertas de apertura vertical, con la interesante solución del motor Ducati en sus entrañas, con ese espartano interior en el que destacaban esos sencillos asientos y ese pomo del cambio fabricado en madera.
Seguimos esperando a que Volkswagen, Audi o Ducati se pronuncien sobre los rumores de venta, mientras no hemos podido caer en la tentación de recordar aquel bonito tango en París que se pegaron Volkswagen y Ducati. Parecía entonces que Volkswagen iba a servirse de los desarrollos propios de Ducati, pero no…