Si piensas en un coche dedicado a la disciplina de drifting posiblemente pienses en los clásicos, coches como el Nissan Silvia S14 o el incombustible Toyota AE86 «Hachiroku». En el panorama europeo, los BMW Serie 3 son protagonistas casi indiscutibles. Sin embargo, es muy posible que no se te ocurra pensar en un Volkswagen Scirocco como coche de drifting. Y es completamente lógico, todos los Scirocco fueron de tracción delantera. Con todo, un noruego llamado Kenneth Alm ha decidido crear la máquina de humo más definitiva e inesperada: un Volkswagen Scirocco con 860 CV… ¡y un bloque diésel sacado de un Audi!
Obviamente, el coche no es diésel, no se me escandalicen. Alm era el propietario de un Audi A4, con el que solía aparecer en un evento llamado Gatebil, organizado en Noruega y dedicado entre otras disciplinas, al drifting. Como el Audi A4 no estaba operativo, decidió transplantar su corazón en un bestial Volkswagen Scirocco de la actual generación. El bloque ha sido extraído de un motor diésel Audi de cinco cilindros, sobre el que se ha instalado una culata reforzada de un Audi S2, así como un enorme turbocompresor Precision Turbo PT67/68. A esto se le suman inyectores de hasta 1.600 cc/minuto de caudal máximo.
El resultado es una monumental potencia de 860 CV, asociados a un par motor máximo de unos mareantes 1.120 Nm – ¿habíamos mencionado que este bloque de 2,5 litros está montado en posición delantera longitudinal? Ha exigido que el radiador se monte en la parte trasera del coche. Toda la potencia pasa al suelo a través de la caja de cambios de un Audi S4, con el diferencial central soldado para romper más fácilmente la tracción de los neumáticos. Una suspensión tipo coilover completamente ajustable es un must en un coche dedicado al drifting, donde la puesta a punto es una de las claves del éxito.
También se ha aumentado el grado de giro de las ruedas delanteras. Además de un freno de mano hidráulico – otra pieza imprescindible del mundo del drifting – también nos encontramos frenos de alto rendimiento, con discos de 355 mm de diámetro y pinzas de cuatro pistones en ambos ejes. Exteriormente, el coche sólo presume de llantas de dimensiones generosas, calzadas con neumáticos baratos, y una decoración llamativa repleta de pegatinas de los patrocinadores. Teniendo en cuenta que algunos de los vídeos que protagoniza tienen 30 millones de visualizaciones, diría que la inversión en publicidad ha sido más que exitosa.
Dicho sea esto, pasen y vean el espectáculo que esta máquina es capaz de dar.
