Afortunadamente, los coches tienen una vida útil muy superior a la de un smartphone, que nos suele durar entre dos y tres años en promedio. Los fabricantes de los teléfonos suelen darles soporte por tres o cuatro años, estando el récord en los notables siete años del Fairphone 2. La pregunta es qué ocurrirá a futuro con los sistemas de infoentretenimiento de los coches, y más en concreto, hablando del sistema operativo Android Automotive. Para responder a ello, primero habría que determinar la vida útil de un coche. Una pregunta de respuesta muy compleja.
Volkswagen acaba de meterse en un buen jardín al responder de forma indirecta a la estimación de vida útil de sus coches. Dirk Hilgenberg, director de CARIAD – la división de software del Grupo Volkswagen – ha anunciado que sus coches, gozarán de soporte y actualizaciones para su sistema de infotainment basado en Android Automotive durante toda su vida útil. ¿Pero cuál es la vida útil de un coche? En una entrevista con el medio especializado Ars Technica, el directivo alemán ha afirmado que Volkswagen ha establecido en 15 años la vida útil de sus vehículos.
15 años es mucho tiempo – casi una eternidad – en términos de tecnología y sistemas de infoentretenimiento, pero en términos automovilísticos es una cifra cuestionable. La definición de vida útil es un periodo de tiempo en el que un objeto cumple de forma correcta la función para la que fue diseñado. Esta definición es especialmente compleja en el mundo de los coches. Y no solo porque la vida útil de un coche depende de forma directa de su tipología de uso y de su mantenimiento, si no también de la ingeniería de sus componentes.
Hay quien afirma que la vida útil que algunos fabricantes estiman para sus coches está más próxima a los 10 años, pero la respuesta puede variar de forma muy sustancial si preguntamos al equipo de marketing, los ingenieros de desarrollo o los especialistas en postventa. Hay que recordar que los parámetros de ingeniería y las pruebas de durabilidad en torno a los que un coche se diseña no son públicos y responden a un uso lo más promediado posible – en base al cliente medio que el departamento de marketing ha designado a ese coche.
Como es lógico, no provoca el mismo desgaste un uso intensivo de un coche como taxi en ciudad, que un uso ligero, como puede ser la circulación exclusiva en vías rápidas. En cualquier caso, el promedio que Volkswagen estima para sus coches convencionales es de 15 años, tras los cuales dejará de dar soporte a Android Automotive, considerando el producto obsoleto – hoy en día, un argumento de compra muy poderoso es la vertiente tecnológica de los coches. Con todo, no debemos olvidar que el Grupo Volkswagen tiene marcas como Porsche, Bugatti o Lamborghini.
En esos casos, Hilgenberg afirma que el soporte durará más años, especialmente en términos de ciberseguridad – algo que en los ordenadores con ruedas que conducimos, es algo a tener en cuenta. Entre las razones no solo está el precio de adquisición de dichos vehículos, si no su uso menos intensivo, su ingeniería de mayor calibre, su carácter de «unicornio» y la imagen percibida del público.