Volvo ha anunciado varios de los siguientes pasos que va a dar para su objetivo de crecer dentro del segmento premium en los próximos años. Cierto es que va a seguir vendiendo modelos híbridos enchufables y microhibridados para 2030, como es el caso del XC90 de tercera generación, pero también sigue su rumbo en lo que a electrificación se refiere. Es por ello que ha anunciado que están trabajando en dos modelos: el EX60 y el ES90.
Primeras imágenes del Volvo ES90
Vayamos por partes. El ES90 es, como os podréis imaginar, la versión sedán del EX90 que poco a poco está empezando a llegar a las calles en estos momentos, tanto en Estados Unidos como en Europa (aunque en España aún no se ha matriculado ninguno, sólo el EX30). Podemos esperar, por tanto, que el ES90 también utilice la IA basada en la plataforma Nvidia Drive (con la tecnología de Qualcomm) y conectado con Google, capaz de recolectar datos de sus sensores, además de radares, LiDAR y cámaras. En esencia, las bases del vehículo definido por software.
Es decir, todo el desarrollo realizado en el EX90 (del que tanto se ha escuchado en estos últimos meses, precisamente en lo que a software se refiere) será utilizado en el ES90, además de continuar con las mejoras a través de actualizaciones Over the Air basándose en los datos recolectados. El ES90 se basaría en la misma plataforma SPA2 del EX90, siendo el próximo vehículo eléctrico que veamos por parte del fabricante sueco propiedad de Geely.
De los dos, es quizás el EX60 (esperado para 2026) el más interesante, situándose como es obvio en tamaño entre el EX30 y el EX90. Pero lo interesante de este modelo es que será el primero que estrene la nueva plataforma SPA3, que mejora entre otros aspectos la capacidad de procesamiento del núcleo. Volvo da a entender que este coche se fabricaría en su planta de Torslanda, Suecia, dado que mencionan estar preparados para producir coches con esta plataforma SPA3.
Según Volvo, lo que de verdad es interesante de esta plataforma es una gran capacidad para escalarse. Esto permitiría crear modelos de toda clase de tamaños, incluso más cortos que un EX30 o, por el contrario, aún más grandes que el EX90 si cabe. Esto permitiría ahorrar costes de manera considerable, aumentando el capital libre de la compañía para invertirlo en otras áreas.
Mayor eficiencia, mayor libertad de escala y otros avances
La marca sueca considera que los motores eléctricos que se utilicen con esta plataforma SPA3, una nueva generación desarrollados por ellos mismos, cuenten con una eficiencia del 93%, mejorando las cifras de sus antecesoras. En comparación, la plataforma SPA2 contaba con una eficiencia del 91% mientras que la SPA1 tenía una eficiencia del 85%. Las baterías, por su parte, contarían con una mayor densidad, lo que permitiría una mayor autonomía.
Un aspecto interesante es que estas baterías formarían parte de la propia estructura de la carrocería, añadiendo rigidez torsional al conjunto, de la misma manera que los motores de combustión se colocan para añadir rigidez al mismo formando parte de la propia estructura. Esto no sólo podría ser un ahorro de peso, sino que daría lugar a optimizar el espacio en el interior del coche, algo importante para el público objetivo de un EX60 o EX90 (Automotive News Europe).
