La seguridad es el pilar fundamental sobre el que se articula Volvo, es, seguramente, lo primero en lo que piensas cuando oyes el nombre de la marca sueca y desde la marca están empeñados en que así siga siendo y que esta sea la característica que más les caracteriza. Hace unos días vimos como Volvo quiere limitar la velocidad máxima de su coche a 180 km/h y además también ha anunciado que quiere instalar cámaras en el interior de sus coches para controlar y solucionar posibles episodios de somnolencia o que algún conductor pueda conducir bajo los efectos del alcohol, pero hay más…
Gracias a la iniciativa EVA otras marcas de coches se podrán beneficiar de las investigaciones sobre seguridad de Volvo
Y es que con el nombre de Iniciativa E.V.A Volvo va a compartir 50 años de análisis de accidentes con todo el mundo para que otras marcas se puedan beneficiar de los datos recogidos en todos estos años de investigación y tests.
El nombre de esta iniciativa, ese E.V.A, viene del ingles, de “Equal Vehicles for All”, que podríamos traducir por Coches Iguales para Todos y nos deja con los resultados de un total de 43.000 coches accidentados analizados por Volvo desde 1970, accidentes reales (no pruebas de choque) en los que se han visto involucrados 72.000 personas.
Desde el 1970 Volvo ha investigado 43.000 coches accidentados
Además Volvo también incorpora en su estudio, en su investigación, resultados de accidentes de otras fuentes globales y pone su foco en que gracias a estos resultados se pueden desarrollar coches más seguros que tengan en cuenta fisionomías diferentes a las que habitualmente se usan para analizar y testar los coches en las pruebas de seguridad, mencionado el hecho de que habitualmente se tiene en consideración maniquís de pruebas masculinos y por extensión no se están teniendo en cuenta las condiciones físicas de otros individuos.
E.V.A es el último ingrediente en sumarse a un cóctel de medidas que nos lleva a recordar una declaración de intenciones por parte de Volvo, que en 2020, en un año, nadie resulte herido de gravedad o muera en un Volvo. Suena demasiado ambicioso pero es el objetivo al que todas las marcas de coches deberían aspirar y en este sentido, por citar un ejemplo fuera de Volvo, BMW nos sugería hace no demasiado un futuro cercano en el que no tendríamos que usar casco al conducir una moto por lo seguro que será el entorno y el propio vehículo que conduciremos.