El fin del motor de combustión interna sigue generando mucho de qué hablar. Y la posible inclusión de su prohibición a partir de 2040 en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética ha generado mucha controversia. Pero algunos fabricantes, como Volvo, ya han asumido cuál es su futuro y plantean objetivos que, si no sorprendentes, sí dejan titulares tan llamativos como este, y van mucho más allá de los objetivos propuestos por la Unión Europea y los países más avanzados en la transición al coche eléctrico. Volvo dobla la apuesta y asegura que la mitad de sus coches serán eléctricos en 2025.
El objetivo de Volvo: la mitad de sus coches eléctricos en 2025
Volvo anunciaba estos días que su presencia en el Salón de Los Ángeles, que abre sus puertas la semana que viene, será atípica. En su stand no se presentará ningún lanzamiento y ni tan siquiera habrá coches. Volvo aprovechará la cita estadounidense, una de las más importantes del año, para presentar sus propuestas de movilidad, conectividad, tecnología y, sobre todo, avanzar cómo quieren evolucionar, del mero fabricante de coches, a una empresa en la que el grueso del negocio esté dedicado a los servicios de movilidad.
Y aprovechando esta cita, Volvo ha descrito cómo espera ser alrededor del año 2025, a mediados de la próxima década. Para entonces, la mitad de sus coches serán eléctricos, y una tercera parte autónomos. También esperan haber establecido relaciones con 5 millones de clientes, asumiendo que, pronto, para Volvo lo más importante no será vender coches, sino prestar servicios.
¿Qué significa que Volvo «venda» la mitad de sus coches eléctricos?
Según las previsiones que han manejado en los últimos años, Volvo espera incrementar sus ventas hasta las 800.000 unidades en 2020, y hasta el millón de coches al año en 2025. En 2017 Volvo vendió 571.577 coches en todo el mundo. El concepto de venta habría que matizarlo, y entrecomillar el sustantivo. Para entonces, Volvo espera también que buena parte de los coches que fabriquen acaben en manos de sus clientes mediante planes de subscripción, como Care by Volvo, o incluso en servicios de coche compartido. Lo que sí sabemos es que ese millón de coches fabricados deberían contar con alguna suerte de electrificación, siendo la mitad híbridos o híbridos enchufables, y la otra mitad completamente eléctricos.
Insistimos en que eso supera, con creces, las expectativas planteadas por la Unión Europea, e incluso muchos miembros que llevan la delantera en la electrificación de sus coches, como Noruega.
La Unión Europea espera que la cuota de coches eléctricos – e híbridos enchufables – sea del 20% en 2025 y del 35% en 2030. De cumplirse sus planes, Volvo habría superado con creces esos objetivos mucho antes.