El vehículo que tenéis en vuestras pantallas es el coche chino más interesante que he visto en mucho tiempo. Se llama Wuling E10, y lo vende una de las marcas de la joint-venture que General Motors tiene en el gigante asiático. Es una minifurgoneta destinada al reparto urbano de última milla, y sus dimensiones son tan compactas que podríamos conducirla por el interior de un supermercado sin problema alguno. Un coche muy curioso que nos demuestra que en ocasiones se cumple aquella máxima que dice «menos es más».
Es un vehículo diseñado con la función en mente. Su diseño no es especialmente llamativo: es un cubo con ruedas, su calandra es un trozo de plástico oscuro y sus ópticas son de lo más convencional. Sus dimensiones son muy curiosas. Mide sólamente 3,31 metros de largo y tiene una altura de nada menos que 1,69 metros. Lo más curioso es que solo mide 1,08 metros de ancho, y por tanto, en su puesto de conducción solo cabe una persona. Aun teniendo un tamaño tan minúsculo, su caja de carga tiene un volumen máximo de casi 1.700 litros.
La versión estándar de la Wuling E10 tiene la caja metálica que estáis viendo en las fotos, pero existe una versión de caja alta refrigerada que puede ser interesante para el transporte de comida, flores o productos como helados. Su interior es absolutamente espartano, pero aun así tiene aire acondicionado manual, puertos de carga USB y una sencilla instrumentación digital. Las Wuling E10 son minifurgonetas eléctricas, pero aun así, tienen un peso muy contenido: en orden de marcha solo pesa 620 kilos.
Con todo, tiene una capacidad de carga de 200 kilos, que resulta más que adecuada para el reparto de última milla. Esta pequeña furgoneta eléctrica tiene un motor de solo 27 CV que mueve el eje delantero. Su velocidad punta está limitada a 71 km/h, por lo que no está capacitado para entrar en una autovía – de venderse en España, sería un cuadriciclo. Su batería es del tipo LFP (ferrofosfato de litio) y tiene solo 9 kWh de capacidad. Es ligera y barata, y permite a la E10 una autonomía de 150 km siempre que no superemos los 40 km/h de velocidad.
Su potencia de carga no admite la corriente continua, pero su baja capacidad nos permite que cargarla en enchufes domésticos sea factible sin suponer una incomodidad. No se vende fuera de China, pero en el gigante asiático tiene un precio que arranca en 36.800 yuanes, algo menos de 4.700 euros.
Fotos de la Wuling E10