La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha supuesto un revuelo inesperado y hasta desesperante para buena parte de los más de tres millones de personas que residen en la capital. La entrada en vigor del calendario de restricciones de la ZBE Madrid 360 se ha nulificado, afectando sobre todo al Distrito Centro y la Plaza Elíptica además de otras zonas de Madrid. De hacerse firme – dependiendo del recurso de casación que podría presentar el Ayuntamiento de Madrid – se podría dar un gran número de sanciones revisables.
El trato desigual hace peligrar el calendario de Madrid 360, pero la sentencia también crea desigualdad
- El TSJM considera que se vulnera el principio de igualdad
- Se considera que hay desequilibrio entre fines medioambientales y derechos sacrificados
- Las consecuencias económicas y sociales como punto clave
- ¿Qué ocurre con aquellos que han tenido que cambiar de coche o vehículo comercial?
- ¿Qué ocurrirá en el futuro con otras ZBE en España, así como las que estarán operativas con posibles sanciones pronto?
El TSJM ha llevado a cabo esta sentencia valorando que los criterios del Ayuntamiento de Madrid eran arbitrarios, sólo para cumplir con la normativa de la Unión Europea, vulnerando el principio de igualdad. Además, la Ordenanza de Movilidad Sostenible de Madrid no respetó el principio de proporcionalidad que exige el TSJ en la Unión Europea. En definitiva, se considera que ha creado un trato desigual entre conductores con el mismo principio de igualdad (Pyramid Consulting).
Pero lo más relevante, a efectos prácticos, no es (solo) ese trato desigual. Son las consecuencias económicas y sociales que han afectado a miles de personas. Gente que ha tenido que vender coches que, aún sin tener etiqueta medioambiental, estaban funcionando perfectamente y se los han tenido que quitar de en medio a toda prisa, en algunos casos malvendiéndolos (coches de hace 20-25 años que, en unos meses, se pide ahora un precio mayor, incluso casos del doble o el triple) para comprar un coche con etiqueta con el esfuerzo económico que ello supone.
Y es que no son pocos los ciudadanos que residen en Madrid, en gran medida por su trabajo presencial, que han tenido que hacer esto mismo. Al esfuerzo que requiere el precio de la vivienda en la capital se ha sumado para muchos este tremendo golpe para poder cumplir con la ZBE Madrid 360. Por no hablar de aquellos que han tenido que renovar sus herramientas de trabajo, en el caso de vehículos comerciales, en un Madrid 360 que ya lleva varios años con cuestiones de recursos de sanciones. Muchos se preguntarán quién repara ese daño, esa injusticia.
Hay que recordar que esta sentencia no es firme dado que el Ayuntamiento de Madrid tiene 30 días para presentar un recurso de casación. En cualquier caso, es una situación inesperada que genera cierta injusticia para quien ya se había adaptado a esa norma.
Otras ZBE en España
Muchas ciudades con más de 50.000 habitantes en España (con su envejecido parque automovilístico respecto al resto de Europa) aún no cuentan con su ZBE, ni se espera que estén establecidas a corto plazo. Ha ocurrido en Madrid, pero esta situación de trato desigual se podría observar a nivel legal en otras comunidades autónomas, sobre todo aquellas en las que hay una mayor proporción de coches sin distintivo medioambiental o distintivo A.
No sólo la sentencia, sino el recurso de casación, pueden servir de ejemplo para lo que pase con otras ZBE en España. Sin dejar de lado la gigantesca importancia de la calidad del aire en las ciudades, la clave está en las consecuencias económicas y sociales – por ejemplo, buena parte de Granada capital entraría en una ZBE con sanciones aplicables a partir del 1 de abril de 2025.