El futuro de la seguridad vial luce, cuanto menos, prometedor. La Dirección General de Tráfico ve en la tecnología el punto de inflexión para reducir una de las grandes lacras de las sociedades modernas que, junto con los avances que está viviendo la industria, hacen soñar con un futuro en el que los accidentes de tráfico dejen de cobrarse miles de vidas cada año. Ahora bien, la tecnología también plantea retos e incertidumbres, como el que rodea a sistemas como las cajas negras, o los Alcolock. ¿Qué dice la DGT al respecto de bloquear tu coche si has bebido? ¿Qué son y cómo funcionan los Alcolock?
¿Qué dice la DGT sobre los Alcolock?
El Alcolock es un dispositivo que bloquea el automóvil e impide su arranque si el conductor ha bebido alcohol. Su funcionamiento se basa en un alcoholímetro conectado al encendido del automóvil. Para poder arrancar el motor de su coche el conductor antes ha de exhalar en un alcoholímetro, que analiza la tasa de alcohol espirada. Si la tasa supera un límite preestablecido, el conductor no podrá encender su automóvil.
La DGT lleva tiempo hablándonos de los Alcolock y estos días retomaba esta idea poniendo como ejemplo el caso italiano. No obstante, los Alcolock también están presentes en los sistemas que pretende hacer obligatorios la Unión Europea en los coches a partir de 2022.
La generalización de los Alcolock en 2022
Como os decíamos, la Unión Europea ha aprobado la introducción en 2022, de fábrica, y obligatoriamente en todos los coches nuevos, de una serie de sistemas pensados para mejorar la seguridad vial. Entre ellos está la preinstalación de Alcolock. En 2022 los automóviles no equiparán, en principio, bloqueo por alcoholímetro de serie, pero sí un dispositivo preinstalado y conectado al encendido del automóvil, que facilitaría la instalación del pertinente alcoholímetro para activar un Alcolock.
El objetivo de la Unión Europea, por lo tanto, es facilitar que los países miembros puedan legislar al respecto y obligar a sus conductores a instalar Alcolock. Con la preinstalación de bloqueo por alcoholímetro, el coste y el trabajo de instalar un alcoholímetro y, por lo tanto, un Alcolock, es relativamente reducido. Es una medida, en definitiva, que motivará a muchos países a obligar a los conductores a utilizar Alcolock en su coche.
En España, la DGT aún no ha propuesto el uso de Alcolock, pero sí valora positivamente el caso italiano. En Italia se ha presentado un proyecto de ley para reformar el Código de Circulación que introducirá el uso del Alcolock, siguiendo los pasos de otros miembros de la Unión Europea. Italia no obligará a todos los conductores a utilizar este sistema, pero sí obligará a utilizar este sistema de bloqueo a aquellos conductores que reincidan en el consumo del alcohol al volante.
Luces y sombras de los Alcolock
Hecha la ley, hecha la trampa. Y basta con leer la definición y el funcionamiento de un Alcolock para imaginarnos los problemas y dudas que plantea. La primera duda, tiene que ver con las dificultades técnicas existentes para emplear un dispositivo que sea capaz de determinar con efectividad si la persona que exhala en el etilómetro es la que está conduciendo o va a conducir.
Por otro lado, los Alcolock, o las cajas negras, sin ir más lejos, siempre plantean debates al respecto del control de la ciudadanía, la privacidad, y las libertades. No obstante, hay debates que son difíciles de justificar. Y a la luz de la gravedad del asunto, ¿quién podría oponerse a cualquier medida o sistema que impida que un conductor bajo los efectos del alcohol coja su coche poniendo en peligro a otros usuarios de la vía pública?
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