Periódicamente surgen noticias que, sin duda, preocupan a los conductores, e incluso llevan a reflexiones más profundas que las que conciernen a la movilidad y la seguridad vial, que entran en el ámbito de las libertades individuales. Estos días regresaba a la actualidad un tema desde el que se apuntaba que la DGT quiere implantar en 2022 un sistema que, de fábrica, limitará la velocidad de los coches, e impedirá que superen los 120 km/h en autovía y autopista, y que superen el resto de límites de velocidad en otro tipo de vías. Pero para tranquilidad de muchos hemos de deciros que en ningún caso se está planteando esta opción. ¿Pero cómo funcionan estos limitadores de velocidad, también conocidos como avisadores de velocidad o por las siglas ISA?
El verdadero plan de la DGT viene impuesto por la UE
Para llegar a una conclusión como esta, y pensar que los coches estarán limitados de fábrica para impedir que superen los límites de velocidad, solo se nos ocurre que se haya producido un error de comprensión en los sistemas de seguridad que la Unión Europea hace obligatorios en coches nuevos en 2022. La Unión Europea, en ningún caso, ha hablado de coches con la velocidad limitada de fábrica, desde el punto de vista más estricto, sino de asistentes de velocidad inteligentes.
Recordemos que en mayo de 2018 la Unión Europea desvelaba una serie de sistemas de seguridad que comienzan a ser obligatorios desde 2022, sistemas que inicialmente pretendían introducirse incluso antes, pero se optó por la fecha de 2022 para conceder algo de margen a los fabricantes. Finalmente, en marzo de 2019, se llegaba a un acuerdo en la Comisión Europea por el cual esta medida tenía suficientes apoyos para ser aprobada.
Limitadores de velocidad y asistentes de velocidad inteligentes
Aunque algunas noticias se está hablando de limitadores de velocidad que serán capaces de restringir la velocidad del coche, evitando que supere los límites de velocidad de cada vía, y utilizando la información a este respecto contenida en bases de datos y posicionamiento mediante GPS, lo que en realidad se introduce en 2022 es el asistente de velocidad inteligente. Y tal y como quedó acordado por la Comisión Europea, que ha definido su funcionamiento en un pliego que refleja unos requisitos técnicos mínimos, ni obliga al conductor a ceñirse a los límites de velocidad, ni limita las capacidades del coche. A continuación os detallamos las condiciones técnicas de los asistentes de velocidad tal y como han sido definidas por la Comisión:
- Si el conductor alcanza o supera la velocidad máxima aplicable en una vía, el coche tendrá que advertirle de ello mediante un estímulo en el propio acelerador. En la práctica esto se consigue haciendo que el conductor sienta un pequeño tope en el acelerador, que desaparecerá si el conductor pisa con más insistencia el pedal, al superar el límite de velocidad. Esto no impide en ningún caso que los fabricantes incorporen otro tipo de advertencias, visuales y sonoras. De hecho, lo normal es que este tipo de sistemas incluyan advertencias visuales, con un icono en la instrumentación, y sonoras, con un pequeño pitido.
- El sistema no podrá desconectarse o suprimirse. Este punto es especialmente importante, puesto que actualmente los asistentes de velocidad pueden desconectarse desde los menús habilitados por el fabricante.
- El conductor podrá anular el funcionamiento del asistente de velocidad si pisa con mayor insistencia el pedal del acelerador, en una operación normal, que no requiera demasiado esfuerzo, ni tampoco pisar a fondo el acelerador. Este punto también es clave puesto que, como ya os contábamos, será el que permita que el conductor sea el que tenga la decisión última de respetar los límites de velocidad o no.
- Cuando esté activado el control de crucero, o cualquier asistente de velocidad de crucero, sea o no adaptativo, este tendrá que adaptar la velocidad del coche automáticamente al límite de velocidad de la vía. En la práctica, esto impedirá que utilicemos el control de crucero a velocidades superiores a las legales.
No solo asistentes de velocidad inteligentes
En definitiva, ya vemos que el asunto del que se está hablando no es una idea de la DGT, sino una medida que ha sido acordada por la Comisión Europea. Por otro lado, ya vemos que en ningún caso se está limitando la velocidad máxima de los coches, ni a 120 km/h, ni a los límites de velocidad de la vía. Lo que se está proponiendo es un sistema que, sin duda, hará que sea realmente difícil que el conductor supere los límites de velocidad sin percatarse de ello. El conductor ya no solo tendrá a su disposición las señales de tráfico de la vía para saber el límite de velocidad, sino que tendrá un estímulo en la propia conducción que le indicará que ha alcanzado ese límite o lo ha superado. Por otro lado, estos sistemas se incorporan únicamente en coches nuevos en 2022.
En los últimos años, los sistemas de seguridad que implantará la Unión Europea han generado no pocas noticias que calificaremos, como mínimo, de engañosas. Se ha hablado, por ejemplo, de bloqueo del arranque mediante alcoholímetro, pero la realidad es que la Comisión Europea únicamente obliga a que los coches incorporen de serie una preinstalación para bloqueos por alcoholímetro. Esta preinstalación permitiría incorporar un alcoholímetro, de fabricantes que los desarrollen cumpliendo ciertos estándares, para que los Estados miembros puedan decidir si optan, o no, por instalar un verdadero bloqueo del arranque por alcoholímetro.
También se incorporan cajas negras, que registrarán los eventos que preceden a un accidente de tráfico.
