Las claves del Diesel R33
El futuro del diésel se llama «diésel azul» o «gasóleo R33». Con unos motores cada vez más eficientes y la necesidad de reducir las emisiones y el impacto medioambiental de los motores de combustión interna, conseguirlo no solo está en propulsores cada vez más complejos, sino también en combustibles más sostenibles. Esta es la base por la que el biodiésel está cada vez más presente en nuestras gasolineras y el motivo por el que próximo gran paso en el repostaje de gasoil pasa por llenar nuestros tanques con diésel azul o R33. Descubramos sus ventajas e incovenientes.
¿Qué es el diésel azul o gasóleo R33?
El diésel R33 es un gasóleo que promete reducir en un 20% las emisiones de CO2 (ciclo pozo a rueda) gracias a una formulación donde encontramos un 33% de biodiésel procedente del reciclado de aceites usados y parafinas. Su denominación comercial es BlueDiesel R33, y aunque en estos momentos no se comercializa en España, en países como Alemania ya ha comenzado su expansión tras superar diferentes programas y ensayos experimentales en los que se han confirmado sus beneficios y compatibilidad con diferentes motores diésel. Sus principales impulsores son el Grupo Volkswagen y Bosch, contando además con la colaboración de socios estratégicos para su distribución como son Shell, Neste y Tecosol.
¿Es compatible mi actual motor diésel?
El primer punto que debemos tener en cuenta es que el diésel R33 es un gasóleo con alto contenido de biocombustible que está homologado con la normativa DIN EN 590. Esto quiere decir que su comercialización y compatibilidad es idéntica al resto de gasóleos que podemos encontrar en las estaciones de servicio, si bien su compatibilidad final está supeditada a las características de nuestro motor diésel, especialmente si éste es antiguo.
Los motores diésel más modernos son compactibles con diferentes tipos de gasóleos en los que ya se incluye un porcentaje más o menos elevado de biodiésel. Esto es un estandar en toda Europa, una regulación que persigue limitar el impacto medioambiental del gasóleo en el transporte por carretera. De este modo en nuestras gasolineras repostamos de forma habitual gasóleo B7, un gasoil compuesto por un 93% de gasóleo procedente del refinado del petróleo y un 7% de biodiésel procedente de aceites vegetales. También se comercializan otras variantes como el B10, el B15 o el B30 donde el porcentaje de biodiésel se incrementa. Recordemos que el diésel azul alcanza un 33% de biocombustible presente en la mezcla.
Dicho esto, la clave de la compatibilidad de nuestro motor la ofrece el fabricante. Por regla general los motores diésel más antiguos ofrecen una baja o incluso nula compatibilidad con el biodiésel, cosa que no sucede con los diésel más modernos (salvo excepciones) dondes es habitual ver tolerancias con B15 o incluso B30. Para cerciorarnos de que nuestro motor es compatible con biodiésel tendremos que comprobar las recomendaciones del fabricante, bien sea a través de las indicaciones junto a la boca de llenado, en el manual de usuario o poniéndonos en contacto con la propia marca.
Posibles averías o problemas tras repostar biodiésel
Si tenemos en cuenta que no todos los motores son compatibles con los biocombustibles, es importante que tengamos en cuenta qué averías podemos sufrir por el uso de biodiésel. Los problemas por usar biodiésel en un motor diésel no compatible pueden llegar a ser fatales en diferentes componentes, y es que el biodiésel cuenta con unas propiedades diferentes al gasóleo convencional en diferentes compuestos.
Estas diferencias con el gasólo convencional necesitan de que el motor sea compatible con el uso de biodiésel en mayor o menor porcentaje, informando de esta compatibilidad para evitar posibles equivocaciones. El principal problema que presenta el biodiésel es su menor capacidad de lubricación, así como el de atacar materiales con base de caucho, plásticos o metales con base de cobre. Este ataque a estos materiales se produce a lo largo del tiempo, por lo tanto no es una avería tan problemática como el repostaje de gasolina en un coche diésel, sin embargo con el paso del tiempo nos enfrentaremos a posibles fugas de gasoil, gripados en bombas de combustible, obstrucción de filtros y problemas en el sistema de inyección.
¿Me costará más repostar diésel azul?
Dado que el diésel R33 aún no se comercializa en Espana, no tardará demasiado, aún no podemos confirmar que no exista un encarecimiento del repostaje de gasoil una vez que el diésel azul desembarque oficialmente en España. En la actualidad el Gasóleo A que consumimos a diario ya cuenta con un mínimo del 7% de biodiésel sin presentar incremento de precio, sí que lo ofrecen variantes de tipo «premium» que son comercializadas con mayor porcentaje de biodiésel y otros aditivios que prometen reducir el consumo y las emisiones.