Una de las partes más importantes de nuestro coche es el motor, sin él nuestro coche no funcionaría. Y, como es de esperar, los coches cuentan con diferente motores, y no sólo hablamos en cuanto al número de cilindros, si no que también cuentan con diferentes distribuciones.
Esto es así porque, dependiendo del número de cilindros, el motor será más o menos grande y tiene que tener una disposición que no ocupe mucho espacio. En otro artículo ya hablábamos de los motores en V y de cómo favorecen al aumento del número de cilindros. En este caso hablaremos de otra disposición muy común, el motor en línea.
¿Qué es un motor en línea?
El motor en línea es una disposición en la que los cilindros del motor de combustión se colocan uno seguido de otro, es decir, en línea como índica su nombre.
Actualmente es el motor más común en turismos, camiones y motocicletas, pues es la forma más sencilla y económica de instalar un motor. Se pueden instalar de forma transversal y son los motores ideales para coches compactos.
El número de cilindros está limitado en este tipo de motores por su distribución ya que el motor no puede ser demasiado largo, si no podría causar vibraciones.
¿Cuántos cilindros puede tener un motor en línea?
Aunque no puede contar con tantos cilindros como un motor en V, los motores en línea más pueden llevar de dos hasta seis cilindros.
Los motores en línea de tres y seis cilindros son bastante comunes, aunque es cierto que ahora mismo los motores en línea de seis cilindros y los V6 están compitiendo por ver cuál es el mejor, ya que los V6 son más compactos, sin embargo, BMW apuesta por los motores en línea y esto hace que se propulsen. Dicho esto, los que más se usan son los de cuatro cilindros, podemos decir que es el motor en línea estándar.
Los motores en línea de dos cilindros se usan en la motos, sobre todo en la década de 1970.
Por otro lado, los motores en línea de 5 cilindros son los más raros de encontrar, pero existen, es más, la marca Audi es muy aficionada a ellos y son los que más los usan, seguidos de Volvo.
Como curiosidad, decir que también existieron los motores en línea de ocho cilindros. Estos motores se utilizaban en coches de lujo y se podrían fabricar con un coste más bajo que los motores en V. Sin embargo, a finales de la década de 1950, estos motores fueron sustituidos por los V8 pues son mucho más compactos y no tienen la gran longitud con la que contaban los motores en línea de ocho cilindros.
Los pros y los contras de los motores en línea
Los motores en línea cuentan con bastantes ventajas, que son las que hacen que sean los motores más habituales en coches actualmente.
La primera ventaja es que su construcción es bastante simple ya que son menos complejos que los motores en V, lo que hace que para una construcción masiva de coches sea ideal, pues no hay que complicarse demasiado. Además, también son baratos de producir, lo que contribuye mucho a la hora de elegirlos para instalarlos en los coches.
La anchura de estos motores es muy reducida, esto ayuda a equilibrar el vehículo.
Aún así, como es lógico, los motores en línea también cuentan con sus inconvenientes. Y es que, aunque la anchura del motor se vea reducida, su longitud no, lo que lo limita a la hora de aumentar el número de cilindros. Por eso mismo se opta por motores en V, ya que son más compactos.
Además, puede que sean fáciles de producir pero al ser más largos y altos, son más difíciles de instalar en el coche que un motor en V. Y con seis o más cilindros, a parte de ser muy largos, las vibraciones del cigüeñal son más difíciles de controlar.
Y aunque sean los más utilizados actualmente por los fabricantes, lo cierto es que los motores en línea son menos eficientes en cuanto a potencia y par motor.
Así que, los motores en línea tienen sus pros y sus contras, pero incluso con esas desventajas, son motores prácticos y fáciles de producir y eso es lo que hace que sean tan habituales.