El mundo del motor evoluciona a pasos agigantados, y es algo normal pues está en constante desarrollo. Ahora mismo lo que se busca es hacer coches de forma más económica pero que contaminen mucho menos que los coches de gasolina o diésel. De hecho, habrá un momento en el que las marcas de coches dejarán de hacer coches de combustión interna. Es más, ya hay muchas ciudades en las que incluso, si tienes un coche que ya tiene un tiempo y es de gasolina o diésel, no puedes circular libremente por ellas.
Ante esto, muchas personas que tienen coches antiguos con motor de combustión interna, que están bien y quieren conservarlos, están aplicando una técnica que cada vez se está haciendo más popular llamada «retrofit».
¿Qué es el retrofit?
El «retrofit» es una técnica que consiste en instalar en cualquier máquina antigua o clásica, elementos modernos. Básicamente modernizar algo manteniendo su estética antigua.
En el caso del que hablamos hoy, la técnica del retrofit se utiliza para convertir coches de gasolina o diésel en coches eléctricos o híbridos.
El objetivo en sí, es darle una segunda vida a nuestro coche.
¿Por qué se hace?
Es probable que pienses que en vez de convertir un coche antiguo en eléctrico, es mejor uno directamente nuevo y que sea eléctrico.
Bueno, lo cierto es que parte de razón llevas, pero no hay que olvidarse de que hay muchas personas que tienen coches clásicos, que están bien y que se puede considerar que son reliquias. En estos casos, puede ser interesante querer convertirlo en eléctrico mediante el retrofit.
Aunque lo cierto es que en el ámbito de restricciones, los coches clásicos están exentos de ellas. Además, los puristas de verdad de los coches clásicos, nunca cambiarían la mecánica original de un coche clásico, y menos aún un cambio tan radical como es convertirlo en eléctrico.
Pero sí que puede haber personas que se encuentren a medio camino de lo clásico y lo actual. Una persona que quiera usar su coche clásico con sistemas modernos como los de hoy en día, tiene la opción de realizarle un retrofit a su coche y tener lo mejor de los dos mundos.
Otra cosa a tener en cuenta es que, aunque es cierto que es una técnica cara de hacer, sigue siendo más barato que comprarse un coche eléctrico hecho desde cero. Además, al hacer esto, a parte de conseguir que tu coche contamine menos al circular, también estas reciclando piezas y no generas tanto residuos. En general, es bueno para el medioambiente.
Desde este punto de vista tiene muchas ventajas, pero no todo es tan bonito.
¿Vale la pena hacerle retrofit a mi coche?
Antes de hacer nada, obviamente tienes que considerar todo lo que supone convertir tu coche en eléctrico.
Si bien es cierto que es más barato que comprarse un coche eléctrico, sigue siendo caro. Lo primero porque necesitas un profesional que sepa hacerlo, y eso no es tan fácil. Aquí ya se va un dinero importante en la mano de obra.
Obviamente, también se necesitas los materiales y elementos necesarios para poder hacerlo. Un kit de conversión, baterías, cableado… Y otros muchos elementos que, obviamente, no son baratos.
Y también tenemos que tener en cuenta que no todos los coches son iguales, y por tanto la técnica no se realiza igual, puede llevar más o menos tiempo. Es decir, que según lo complicado que sea, y el tiempo que tengan que echar los profesionales, te costará más o menos.
Y si estas pensando en hacerlo tú para ahorrarte el dinero de la mano de obra, no corras tanto, porque no es una técnica fácil de hacer. A no ser que tengas mucha experiencia o directamente seas un profesional, lo mejor es que lo dejes en manos de un profesional que sepa hacerlo. No te lances a ver tutoriales sin más.
Bueno, y una vez que el coche ya es eléctrico no ha acabado la cosa. Cuando ya lo tengas listo, tendrás que realizar la homologación del vehículo, pues hay que comprobar que todo está bien y que el coche es seguro. Y por supuesto, esta homologación también cuesta dinero, puede rondar los 7.000 euros.
Por decirlo así, convertir un coche de combustión interna en eléctrico o híbrido puede costarte alrededor de unos 25.000 euros.
¿Es legal en España el retrofit?
Claro, si vas a convertir un coche en eléctrico, lo mínimo que debes saber antes de gastarte el dinero es si es legal o no en España.
Sí, en España es legal el retrofit, pero como decíamos antes, es necesario someterlo a un proceso de hologación para poder circular con él. El problema de esa homologación es que es un proceso costoso y cuesta mucho trabajo. Por eso mismo, cuesta tanto dinero realizarla.
De hecho, ya hay algunas empresas que realizan el retrofit, como Elektrun Cars. Así que si quieres convertir en eléctrico tu coche antiguo, es posible y legal siempre y cuando lo homologues.
El retrofit y las zonas de bajas emisiones
Obviamente, el convertir nuestro coche en eléctrico cuenta con muchas ventajas a la hora de circular.
Como todos sabemos, cada vez en más ciudades se están implantando las zonas de bajas emisiones. Teniendo en cuenta que si tienes un coche con algunos años y es de combustión interna no puedes circular con él… Resulta interesante convertirlo en eléctrico, sobre todo si el coche está bien.
Claro, dependerá de si el coche eléctrico o híbrido, del nivel de emisiones que produzca y de más. Pero aún así, fácilmente puedes tener un coche con un etiqueta ECO o Cero, cuando antes le correspondía una etiqueta C o B.
Esas etiquetas nos dan un serie de ventajas bastante interesantes para aparcar o para circular por el centro de las ciudades sin problemas.
Puede que no sea la técnica más económica del mundo, pero es una técnica que está cogiendo mucha relevancia y que ha llegado para quedarse. Así que no te extrañes si ves un coche bastante antiguo con una etiqueta Cero emisiones paseando por tu ciudad sin restricciones.