Las noticias que nos llegan de Dacia estos días apuntan a que muy pronto asistiremos a uno de los acontecimientos más importantes para la marca en los últimos años. Dacia va a lanzar un coche eléctrico y durante los últimos meses ha habido muchas especulaciones al respecto, e incluso el atrevimiento de situar el precio del nuevo Dacia eléctrico en el entorno de los 10.000 euros.
Partimos de la base de que este artículo se elabora antes de que se presente el coche eléctrico de Dacia y por lo tanto se conozca su precio definitivo, e incluso antes de que se presente un prototipo previo que debería anticiparnos con bastante precisión cómo será este producto. Lo único que ha sido confirmado oficialmente es que, según Dacia, será el coche eléctrico más barato del mercado.
Ahora bien, ¿tiene Dacia la receta para comercializar un coche eléctrico por 10.000 euros? ¿Cuál es?
La receta económica de Dacia aplicada a un coche eléctrico
En el vídeo superior abordábamos nuestra prueba del Dacia Duster apuntando al quid de la cuestión, ¿por qué es tan barato?
Lo primero que deberíamos asumir es que los ingredientes presentes en la receta para hacer que los Dacia sean coches baratos, en general, tendrían que ser los mismos que estén presentes en su eléctrico. Eso implica, entre otras cosas, renunciar a maximizar los márgenes de beneficio, al menos en las versiones de acceso, las del precio gancho, puesto que esos márgenes se reservan únicamente para las versiones más equipadas, véanse los Stepway o las ediciones especiales lanzadas en los últimos años.
Entre los ingredientes tampoco han de faltar un equipamiento de serie muy escueto, en todo lo que respecta a confort, e incluso ayudas a la conducción, y reutilizar en la medida de lo posible tecnologías compartidas con otros productos del Grupo Renault, en muchos casos ya amortizadas, especialmente en lo que respecta a plataformas y mecánicas. Pero en este punto profundizaremos más adelante.
Imagen del coche eléctrico urbano y económico comercializado por Renault en China.
Las particularidades de un coche eléctrico Dacia
Si bien es cierto, la receta de un coche eléctrico y económico de Dacia incorpora los ingredientes que ya están presentes en la receta económica del resto de productos, el mayor problema que tiene un eléctrico es el del elevado coste de las baterías. No dudamos de que Dacia pueda producir el coche eléctrico más económico del mercado, significativamente más barato que otros eléctricos de la competencia, comparables por tamaño y especificaciones técnicas. Pero la única posibilidad que se nos ocurre para que un coche eléctrico de Dacia se aproxime a los 10.000 euros es que se opte por la alternativa del alquiler de baterías.
Esta opción no solo no es descabellada, sino que Renault ya ha trabajado con ella con uno de los coches eléctricos más populares del mercado, el Renault Zoe. Pero también implica un reto adicional para Dacia, el de convencer a su clientela empleando argumentos como el coste por kilómetro, y la amortización de la cuota, para comprender el sentido de pagar un alquiler mensual de baterías.
Incluso optando por la vía del alquiler de baterías, es de suponer que Dacia, de nuevo, apostaría por tecnologías modestas. Para minimizar los costes de su coche eléctrico Dacia debería recurrir a sistemas eléctricos sencillos y poco potentes y sobre todo packs de baterías con una capacidad de almacenamiento y, por ende, autonomía, moderada.
El Renault K-ZE comercializado en China es una de las posibilidades que barajamos como la posible base que se utilice para este nuevo eléctrico de Dacia.
La plataforma idónea para el eléctrico de Dacia
Por último, pero no por ello menos importante, hemos de hablar de la plataforma del Dacia eléctrico. La plataforma es quizás el elemento más importante para hacer que este coche sea asequible. Importante, porque el empleo de una plataforma amortizada no solo es rentable por el mero hecho de haber sido utilizada en el pasado, sino sobre todo porque facilita su producción y el empleo de otros muchos componentes ya amortizados y empleados en otros productos del Grupo Renault. Por ejemplo, el grueso de la gama Dacia, del Sandero, el Logan y el Lodgy, al Duster, emplea la plataforma B0, derivada a su vez de la tercera generación del Renault Clio que comenzó a producirse en 2005.
Aunque aún existen muchas dudas al respecto, el abanico de posibilidades con que cuenta Dacia, por razones obvias, no es demasiado extenso. Una de las opciones pasaría por aprovechar la base del Renault Zoe, un coche eléctrico del segmento B en producción desde 2012.
La segunda opción y la que para muchos, entre los que me incluyo, tenía más sentido, era la de adaptar la base del Renault K-ZE, un crossover muy pequeño y eléctrico que se comercializa en China. No obstante, y de nuevo por razones obvias, deberíamos estar ante una versión completamente revisada o mayormente modificada del producto que se comercializa en China, para adaptarse a los requisitos, en términos de espacio, calidad, tecnología y seguridad, que se exigen en Europa.
En cualquier caso, esto sigue siendo un ejercicio de especulación. Y no será hasta dentro de unos días, cuando se presente el anticipo del Dacia eléctrico en el Salón de Ginebra, cuando tengamos más detalles, ahora sí oficiales, de este coche eléctrico que seguro dará mucho de qué hablar.
Más imágenes del Renault K-ZE en el que podría basarse el Dacia eléctrico:
