La historia de AMG como preparador oficial de Mercedes comenzó en los años 90, pero AMG existía ya desde los años 60 del pasado siglo. A lo largo de los años 80, el acercamiento progresivo a Mercedes se materializó en coches como el AMG «Hammer», un Mercedes W124 al que se le llegaron a montar motores 6.0 V8 que coqueteaban con los 400 CV de potencia. En esa época, también desarrollaron kits de carrocería y potenciaciones para diversos vehículos Mercedes. Lo que quizá no sabías era que AMG produjo su primer vehículo diésel en los 80, una versión preparada de la incombustible Mercedes MB 100 D, fabricada en Vitoria.
La Mercedes MB 100 D se produjo entre los años 1981 y 1995, y se produjo siempre en España, en las instalaciones de Mercedes-Benz Vitoria. De esa fábrica salen ahora las Mercedes Vito y Mercedes Clase V, pero hubo un tiempo en que dichas instalaciones no pertenecieron a Mercedes. Eran unas instalaciones donde una joint-venture entre DKW e IMOSA producían la DKW F100 bajo licencia. Esta furgoneta era fabricada bajo licencia en España, y tras la adquisición de DKW por parte de Mercedes en 1958 – que la vendería a los seis años a Volkswagen – fueron fabricadas como Mercedes N1000 y N1300.
Mercedes asumió la propiedad de la fábrica de DKW en Vitoria, donde en 1981 comenzó a producir las nuevas Mercedes MB 100 D. Estas furgonetas eran versiones muy evolucionadas de las DKW F100, de la que conservaban poco más que su chasis de tracción delantera. Se fabricaron en Vitoria hasta el año 1995, cuando fueron reemplazadas por las Mercedes Vito, de diseño mucho más avanzado y mucho más modernas a todos los niveles. El diseño de las MB 100 D fue actualizado en 1987, con una carrocería más angulosa y un diseño que guardaba ciertas similitudes con sus superventas de la época, los Mercedes W201 y Mercedes W124.
En 1989, AMG presentó en sociedad su particular interpretación de la Mercedes MB 100 D. Era una furgoneta de aspecto mucho más deportivo, dotada con nuevos faros, una nueva calandra sin el logotipo de Mercedes y calzada con llantas AMG de 8×15 pulgadas, envueltas en neumáticos Dunlop G/T Qualifier de alto rendimiento y medidas de hasta 255/60 R 15 H. La parte baja de la carrocería estaba acabada en color gris en las unidades expuestas por AMG, pero el preparador tenía la capacidad de pintarlas del color que el cliente deseara. La preparación no terminaba aquí, ya que afectaba también al propulsor y al habitáculo.
En el interior del coche se instalaron asientos deportivos forrados en cuero y Alcantara, hasta nueve asientos según la configuración de partida escogida por el cliente. Además, AMG instalaba un volante personalizado, una mesa, e incluso tapizaba en Alcantara el interior de la furgoneta. Los límites los ponía realmente la cartera del cliente – incluso era posible encargar un teléfono o un equipo de vídeo para el coche, siempre de la más alta calidad. Si se nos iba de las manos, el precio de la furgoneta podía coquetear con los 100.000 marcos alemanes, entonces unos 50.000 euros actuales.
Bajo los asientos delanteros de las MB 100 D latía un motor diésel de 2,4 litros y aspiración atmosférica, asociado a una caja de cambios manual de cinco relaciones. Era un sólido pero lento OM 616 de 72 CV de potencia, estrenado en los Mercedes W124 240 D – clásicos a finales de los años 70. AMG instaló un kit de turboalimentación en este propulsor, llevando su potencia hasta unos respetables – para un furgoneta de la época – 100 CV, asociados un par máximo de 193 Nm a 2.600 rpm. AMG también ofrecía en la época kits de turbo para los diésel atmosféricos de cinco cilindros de los Mercedes 300 D, pero esa es harina de otro costal.
AMG también fabricó varias MB 100 D para los equipos de Mercedes 190 E que corrían en el DTM, preparados y mantenidos en su totalidad por AMG – eran vehículos de transporte de pilotos o de asistencia. Se puede ver alguna unidad decorada con colores clásicos, como el mítico negro rayado de Boss y König-Pilsener. Tras las Mercedes MB 100 D, habríamos de esperar una década para conocer al siguiente, y hasta la fecha, último diésel preparado por AMG. La historia de los Mercedes C 30 CDI AMG os la hemos contado en este artículo. Solo recordad que no fue el primer AMG diésel, y recordad que el primero, además, era «Made in Spain».
Fuente: MyVan Mercedes