¿Te atreverías a domar 1.842 CV con tres pedales? Hennessey se lo permitirá a 12 privilegiados
A los que amamos la conducción nos encantan los cambios manuales. Aun así, si el coche es demasiado potente y demasiado rápido, llega un punto en el que un cambio manual empieza a convertirse en un cuello de botella para nuestra atención, nuestras habilidades y la propia celeridad con la que todo sucede. Por encima de los 400 o 500 CV, un cambio automático nos "quita" trabajo y nos permite concentrarnos en la conducción. Entonces, ¿qué se