El Toyota bZ4X es un SUV completamente eléctrico, del segmento D, producido por Toyota desde el año 2022. Actualmente se comercializa la primera generación. El Toyota bZ4X se caracteriza por ser el primer coche eléctrico que comercializa Toyota en grandes volúmenes, estando desarrollado en colaboración con Subaru, marca que comercializa un modelo muy similar bajo la denominación de Subaru Solterra. Se fabrica en la factiría de Toyota en Aichi (Japón).
Entre los SUV eléctricos que rivalizan con el Toyota bZ4X nos encontramos, además del ya citado Subaru Solterra, con el Volkswagen ID.4, el Skoda Enyaq, el Ford Mustang Mach-E, el Tesla Model Y, el Kia EV6 o el Hyundai Ioniq.
Diseño exterior del Toyota bZ4X
El diseño exterior del Toyota bZ4X se caracteriza por una imagen moderna, con mucha personalidad e incluso con rasgos deportivos. Se trata de uno de los diseños más arriesgados de Toyota, una apuesta clara por diferenciar a este modelo del resto de la gama, además de para conseguir distinguirse de todos los rivales de su categoría. Hasta cierto punto, y según las líneas en las que no fijemos, podemos intuir una imagen que recuerda incluso al diseño más marcado y anguloso de Lexus, la firma premium de la propia Toyota.
El Toyota bZ4X tiene una longitud de 4,69 metros, 1,65 metros de altura y 1,86 metros de anchura, contando además por una batalla de 2,85 metros y un volumen de maletero de 452 litros. Dado su diseño con ciertos aires coupé, donde la caída del techo se acentúa desde la zona de los pasajeros posteriores hasta el maletero, el aprovechamiento del espacio interior no es tan óptimo, sin embargo el bZ4X consigue ofrecer una imagen más dinámica y atractiva, pudiendo así competir con otros rivales que emplean este tipo de carrocerías como el Volkswagen ID.5, el Skoda Enyaq Coupé o el Ford Mustang Mach-E.
Sistema de propulsión del Toyota bZ4X
Son dos las configuraciones de propulsión que ofrece el Toyota bZ4X, estando ambas alimentadas por la misma batería de iones de litio con 71,4 kWh. Las dos versiones disponibles se diferencian en la potencia máxima y en la configuración de tracción: 204 CV en versión de tracción delantera, 218 CV en versión de tracción total. La versión 4×2 del bZ4X consigue más de 450 Km de autonomía, mientras que la versión 4×4 se queda en 420 Km. Como contrapartida, mientras el bZ4X 4×2 necesita 8,4 segundos para hacer el 0-100 Km/h, el bZ4X 4×4 necesita 7,7 segundos para la misma medición.
La recarga de las baterías se puede realizar a potencias de hasta 11 kW en corriente alterna (conector Mennekes tipo 2) o hasta 150 kW si usamos corriente continua (conector CCS). Uno de los aspectos más llamativos del Toyota bZ4X es el hecho de que Toyota garantiza una degradación de la batería inferior al 10% durante los primeros 10 años o 160.000 Km.
Para conseguir la máxima eficiencia energética y así no perjudicar a la autonomía, el bZ4X instala de serie un sistema de calefacción por bomba de calor, pudieno instalar opcionalmente un techo solar que promete ser capaz de generar energía suficiente como para recorrer 1.800 Km al año.
Dado que el Toyota bZ4X es un modelo desarrollado en colaboración con Subaru, este crossover eléctrico se beneficia de funciones habituales en modelos Subaru como es la tecnología X-Mode. A través de este sistema, el control de tracción adapta el par que llega a las ruedas cuando circulamos sobre superficies deslizantes como barro o nieve. Este sistema trabaja a velocidades de hasta 20 Km/h.
Diseño interior del Toyota bZ4X
El interior del Toyota bZ4X destaca por ofrecer mucho espacio, un diseño futurista y una sensación de robustez en su construcción. Toyota ha creado un habitáculo que si bien mantiene la filosofía del resto de sus productos, en el bZ4X ofrece un diseño más llamativo gracias al uso de un cuadro de instrumentos de 7″ ubicado en una posición muy retrasada con respecto del conductor, una enorme consola central que divide el espacio disponible entre los pasajeros delantero y un sistema multimedia central con pantalla táctil de 12″.
Las posibilidades en asistencias a la conducción son elevadas, destacando entre ellas el sistema One Motion Grip que sustituye el volante redondo por uno de diseño rectangular, y que además emplea una dirección electrónica (más información de este sistema steer-by-wire) que prescinde de conexión física entre las ruedas delanteras y el volante. Esta dirección es capaz de modificar la desmultiplicación en tiempo real según la velocidad, prometiendo así que en situaciones donde necesitemos girar mucho las ruedas, el recorrido del volante entre topes será de máximo 150º. Que es muy poco.
Tras nuestra primera toma de contacto con el bZ4X, si bien podemos confirmar que el habitáculo ofrece una buena sensación de empaque y robustez, los materiales empleados son sencillos y poco lujosos, siendo abudantes los plásticos duros en todos los niveles.
Donde sí que brilla el bZ4X es en amplitud, algo que se percibe en todas sus plazas. Pero es en las plazas posteriores donde esta sensación es más acusada, pues es mucho el espacio libre disponible para las piernas y en cuanto a anchura, además de disfrutar de un suelo prácticamente plano. La única cota mejorable es la altura disponible para la cabeza en los asientos posteriores, pues dado el diseño del coche y el suelo más elevado por culpa de las baterías, personas de más 1,85 metros pueden tener problemas.