Skoda presentó en el Salón internacional de París de 2010 un prototipo eléctrico que se convertía en el primer vehículo de estas características de la marca. Ahora estos prototipos pasan a la cadena de producción, pero no, de momento no podrás ir al concesionario a comprar uno, ya que las unidades que se produzcan se utilizarán como vehículos de prueba.
Se producirá una reducida flota de 10 Skoda Octavia Green E Line a través de los cuales se pretende recoger datos sobre fiabilidad, seguridad o usabilidad de estos modelos y su tecnología en el entorno natural para el vehículo, el día a día en una circulación abierta, fuera de circuitos de pruebas y pistas de test.
Estos primeros Skoda electrificados llegarán a la calle en otoño y contarán con un motor eléctrico con una potencia constante de 60 kW y una máxima de 85 kW. El par máximo de este motor es de 270 Nm que como buen motor eléctrico se ofrecerán desde 0.
El propulsor eléctrico lleva al Skoda Green E Line hasta los 100 Km/h en 12 segundos, alcanzando una velocidad máxima limitada de 135 km/h. Con estas cifras la autonomía de la batería de litio de este Skoda es de 150 Km. El equipo de baterías lastran el modelo con 315 Kg provenientes de las 180 pilas de iones de litio de las que se compone su batería.
Para recargar sus baterías, el Skoda utiliza una toma a la red eléctrica convencional. Conectado a una red normal tarda 8 horas en recargarse, pero si disponemos de una toma de 400v la recarga se puede llevar a cabo en la mitad de tiempo, 4 horas. Su toma de corriente se encuentra en el lugar en el que actualmente se encuentra la tapa del depósito de combustible.
El Octavia Green E Line toma como base para desarrollar este proyecto al Skoda Combi, debido a su capacidad para albergar las baterías, el motor eléctrico y los diversos controles electrónicos en el espacio de su suelo modular.
Estos 10 Skodas eléctricos recogerán datos, sensaciones y pondrán a prueba la tecnología eléctrica del grupo VAG. Suponen un paso más en la necesaria reducción de cifras de CO2 dentro de las gamas de los fabricantes de cara a cumplir con las restricciones de las próximas normativas contra la contaminación.
Skoda ya incorpora en su gama sistemas como el Star&Stop, recuperadores de energía en la frenada o indicadores de marcha recomendada dirigidos a reducir los consumos y las emisiones contaminantes, pero el Octavia Green E Line va un paso más allá convirtiéndose en el primer Skoda con tecnología eléctrica. No sería raro ver la tecnología que se está testando en estos Skodas en algún futuro Volkswagen.
Fuente: Skoda
En Tecmovia: Volkswagen mostrará en septiembre un coche eléctrico con una sola plaza, Volkswagen apuesta por una versión híbrida de todos sus modelos