Protean, el fabricante detrás de esta concepción de la propulsión eléctrica, acaba de hacer oficial que su proyecto innovador llegará a producción tras recibir una inversión de 84 Millones de dólares para que su fabricación en serie se lleve a cabo en China. Esta solución pretende respaldar un proyecto muy prometedor dentro de la industria que se aleja de los planteamientos convencionales de una única unidad motriz conectada a las ruedas mediante transmisiones y diferenciales.
La apuesta de Protean se hizo mundialmente conocida al ser la tecnología escogida por Brabus para impulsar a los Benz Project Hybrid y High Performance 4WD Full Electric. Una particular visión deportiva de como podrían ser las preparaciones del experto alemán sobre la plataforma de un Mercedes Clase E de la actual generación. Tanto en variante híbrida o como en versión puramente eléctrica, la adopción de motores eléctricos dentro de la propia rueda arrojaba dos aspectos fundamentales: reducido peso del sistema y un muy bajo centro de gravedad.
Después de recorrer diversos salones y exposiciones haciendo gala de la tecnología de propulsión eléctrica dentro de la propia rueda, Protean parecía abocada a convertirse en una leyenda de lo que pudo ser y no fue. Finalmente podemos estar de enhorabuena conociendo que el futuro del fabricante pasará por la fabricación en suelo chino, con la esperanza de que los fabricantes se fijen decididamente por el desarrollo de este tipo de propulsión.
Obviamente existe un contrapunto bastante importante al hablar de este diseño tan peculiar y que nunca ha terminado de cuajar entre los fabricantes, porque aunque Protean haga gala de un diseño que rompe los moldes, el concepto de ubicar todo el sistema de propulsión dentro del cubo de la rueda no es nada nuevo. El principal temor de este diseño, olvidando los altos costes de desarrollo, reside en el cómo afectará al sistema el paso del tiempo y las diversas irregularidades que deberá soportar durante su uso.
Este temor lo provoca el contar con un factor del que todos los fabricantes huyen al diseñar cualquier tipo de tren motriz: la masa no suspendida. Un concepto referente a toda masa comprometida con el propio movimiento de la rueda, y no suspendida sobre ésta como se lleva a cabo en el resto de vehículos sean del tipo que sea. Este aspecto condicionante modifica ampliamente el comportamiento del vehículo, por lo que el temor a usar este tipo de diseños tiene su razón de ser.
Aún así el planteamiento de Protean promete grandes avances en la evolución de su diseño prototipo, una serie de mejoras que se enfocarían en el rendimiento del conjunto y en la reducción del peso que debería soportar cada una de las ruedas. La clave del diseño residirá en ofrecer una simplicidad, costes y peso contenidos que puedan marcar las diferencias respecto a los diseños convencionales de un único propulsor.
Fuente: AutoblogGreen
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