El avión supuso una gran revolución para el transporte de personas a lo largo y ancho del mundo, reduciendo el tiempo necesario para llegar de un punto a otro hasta cifras insignificantes si las comparamos con las distancias recorridas. Sin embargo, por corto que sea, el tiempo que uno pasa anclado al asiento del avión siempre se hace eterno, y mucho más si se trata de vuelos transoceánicos de más de una decena de horas.
Para aliviar el sufrimiento de los viajeros y distraerlos durante el vuelo, Lufthansa y Virgin America están desarrollando un nuevo dispositivo de entretenimiento que irá incrustado en la parte trasera del cabecero de los asientos; una especie de actualización del sistema RED que hasta ahora incorporaban en exclusiva los aviones de Virgin.
El nuevo aparato consiste en una pantalla táctil con capacidad para reproducir vídeo en alta definición y conexión a Internet mediante WiFi. Además, cada asiento incorporará un teclado QWERTY inalámbrico que permitirá al usuario navegar, ver la televisión en directo y acceder a juegos y contenidos audiovisuales, así como a un panel destinado a la comunicación con el personal del vuelo y un servicio de mensajería instantánea para mejorar la comunicación entre los pasajeros.
Aunque Virgin promete que el nuevo sistema RED ofrecerá una experiencia de vuelo nueva y singular, lo cierto es que el actual ya es bastante completo. Desde mayo de 2009 incorpora WiFi para todos los pasajeros a un precio que parte de los 5$, así como televisión por satélite, videojuegos y un sistema de mensajería instantánea semejante al descrito anteriormente.
A pesar de que estos dispositivos no se implantarán en los aviones hasta finales de 2012, un Airbus A320 bautizado con el nombre de #nerdbird (algo que podríamos traducir como “pájaro empollón”) ya vuela totalmente equipado con el objetivo de probar esta nueva tecnología.
Algunas aerolíneas deberían de tomar ejemplo para comenzar a mejorar la experiencia de vuelo de sus clientes. Es una pena que, en muchos casos, la increíble sensación de mirar por la ventanilla y ver el mundo a tus pies mientras surcas el cielo se convierta en una auténtica pesadilla cuando vuelves la cabeza hacia la realidad de la cabina y la lentitud de las manecillas del reloj.
Fuente: ABC
Más información: Virgin America
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