Desde luego no se trata de una noticia que vaya a conmocionar al mercado, pero sin duda posee un trasfondo digno de ser analizado. El ActiveHybrid X6 se presentaba como un vehículo híbrido de 486 CV, por lo que el termino ecológico que suele englobar a estos modelos, desaparecía. Con esta primera muerte prematura, puede que asistamos a una revisión por parte de BMW de lo que para ellos significa un vehículo híbrido.
Por mucho que desde BMW se empeñaran en mostrar sus modelos ActiveHybrid, tanto la serie 7, como el X6, como modelos eficientes, ecológicos, etc. Nunca terminó de cuajar la filosofía de este tipo de modelos marginales, en BMW concebian estos híbridos como una solución de consumo para conservar las altas prestaciones. Pero el público de los vehículos de los 400 a 500 CV poco o nada se interesan por una reducción del consumo, añadiendo además, un suplemento de elementos, tecnología y peso difícil de amortizar.
Presentado en Junio de 2010 con un precio de 118.000 €, este BMW X6 ActiveHybrid entraba por derecho propio en la liga de los grandes SUV’s de altas prestaciones, ya que por potencia y precio se alejaba, y mucho, de las demás opciones híbridas ofrecidas. El modelo híbrido más cercano consisitía en el Porsche Cayenne S Hybrid con 379 CV y un precio de 88.526 €, lo que suponía una diferencia de casi 30.000 €.
Además, dentro de la propia gama, el BMW X6 encontraba a sus dos peores rivales, por un lado la versión Xdrive 5.0i contaba con el mismo motor V8, similares prestaciones y una rebaja del precio de 31.000 €, lo que obligaba al conductor de la versión híbrida a realizar alrededor de 380.000 km para poder amortizarla. Después, sería presentada la versión X6 M con 555 CV y ofreciendo verdaderas prestaciones firmadas por el departamento Motorsport, añadiendo solo 7.000 € más a la factura previa del ActiveHybrid.
¿Fallo de estrategia o cambio de filosofia?
Sin duda, queda claro por la brevedad de la vida de este modelo, que BMW no se lo ha pensado dos veces antes de tomar esta decisión, es más, desde BMW ni si quiera se aventuran en ofrecer las ventas de este modelo hasta el día de hoy. Queda claro por lo tanto, que este modelo, de un modo u otro, ha sufrido un fallo de ubicación en la gama por lo menos, aunque un servidor se aventuraría a más. En mi parecer la idea de BMW respecto a su gama de híbridos de altas prestaciones está equivocada, más si cabe teniendo en cuenta los avances que están mostrando las tecnologías en los últimos motores de gasolina.
La concepción de un modelo híbrido debe suponer y abanderar una reducción del consumo notable respecto a sus hermanos de gama. Por otro lado, su precio debe ser competitivo y no suponer un plus por tener las últimas innovaciones en tecnología motriz. En resumen, la vida de este ActiveHybrid habría sido otra de contar con un motor, por ejemplo, como el seis cilindros en línea con tres litros y doble turbo, capaz de ofercer una potencia combinada de 350 CV.
También es justo añadir, que en BMW estan en pleno desarrollo de la submarca «i» y este movimiento, pueda responder a una nueva estrategia respecto a los modelos híbridos-eléctricos dentro de la propia marca. Tendremos que estar pendiente al futuro de BMW en este sentido, ¿será el BMW ActiveHybrid 7 la próxima víctima?.
Os dejamos a continuación, un vídeo en alta definición donde BMW nos muestra lo que suponía para ellos el ActiveHybrid X6:
Fuente: BMW
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