General Motors acaba de hacer público un acuerdo con la compañía japonesa Teijin, para la fabricación y diseño de piezas termoplásticas reforzadas con Fibra de Carbono (CFRTP). De este modo, el fabricante norteamericano se suma a otras tantas marcas como las alemanas Audi y BMW para la incorporación, en cada vez mayor medida, de estos nuevos plásticos para elaborar determinadas partes de sus futuras creaciones.
BMW fue de las pioneras en subirse al carro de la creación de piezas reforzadas con Fibra de Carbono, y desde que la casa muniquesa lo hiciese, muchas más marcas han apostado de manera notable por la introducción de este diseño en sus modelos. Hay que destacar que los plásticos reforzados serían hasta 10 veces más fuerte que el acero convencional, no confundir con los aceros ALE, y en báscula otorgarían un cuarto del peso que marca el acero.
El ahorro de peso y la rigidez que proporciona la Fibra de Carbono está fuera de toda duda, sin embargo, los precios se mantienen en términos prohibitivos. Este hecho, es el que ha llevado al diseño que combine una proporción menor de la estructura en este material, y el resto en diversas resinas que mantengan sus cualidades intactas. El resultado es un producto superior a cualquier elemento fabricado en plástico como único componente, a la par de uno costes más contenidos que si empleáramos solo la fibra de manera masiva.
¿Serán Corvette y Volt los primeros en beneficiarse?
General Motors no ha facilitado los primeros diseños que querrá fabricar con este nuevo material, pero conociendo que la mayoría de fabricantes están apostando en emplearlo en zonas específicas del chasis y en conjuntos y sub-conjuntos de la estructura, los americanos no se alejarán mucho de este camino. En lo referente al apartado modelos, es poco probable que el nuevo producto llegue manera rápida a toda la gama debido a sus costes, aunque elucubrando un poco, la próxima generación del Corvette está en el horno, y Chevrolet está más que dispuesta a crear un producto que nada tenga que envidiar a otros deportivos en Nurbürgring.
También se cita al ahorro de peso como una de las mayores ventajas por las que General Motors ha realizado el acuerdo. Cierto es, que en modelos como el Chevrolet Volt y similares, el ahorro de peso es clave por el lastre que suponen las baterías, por lo que contar con este elemento, podría favorecer en gran medida las prestaciones de los futuros coches del grupo americano.
Fuente: General Motors
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