Tesla nos hizo soñar a todos los aficionados al motor. Lo hizo al crear un vehículo pasional en un mundo, el de los coches eléctricos, que parecía abocado a sucumbir entre vehículos totalmente enfocados a la practicidad, dejando a un lado aspectos como su estética o la diversión al volante. El Tesla Roadster llegó para ser el deportivo eléctrico más reconocido, para ser el que diera un poco de luz al futuro automovilístico… si el futuro del automóvil pasaba por la electricidad era necesario contar con un deportivo, un biplaza, un cabrio, un vehículo destinado a satisfacer al corazón y entonces es cuando el Tesla Roadster se convirtió en pionero.
Ha servido de inspiración a multitud de empresarios e incluso se ha convertido en el objetivo y principio de muchos pequeños fabricantes que querían vivir el sueño de Tesla de crear un deportivo eléctrico, la inspiración de Silicon Valley llevada al motor. Hace ya 5 años que el Tesla está entre nosotros y hoy, toca despedirse de él.
No se trata de un anuncio repentino, no nos coge desprevenidos, la marca ya anunció hace ya unos meses que el 2011 sería el último año del Roadster. Conocemos la apuesta más inmediata de la marca por el Model S después del desembarco masivo que supuso el Roadster aupándola como uno de los referentes eléctricos. Es una buena apuesta, una berlina para pasar de un nicho reducido de deportivos a uno más generalista… pero indudablemente el Tesla Roadster se merece un minuto de silencio eléctrico…
Y para hacerlo Tesla ha decidido vestir al Roadster para su despedida. El vestido elegido se llama Final Edition, insinuante en sus intenciones desde luego. Esta edición especial, como toda buena edición especial está limitada o mejor dicho, muy limitada, ya que formarán parte de ella sólo las últimas 15 unidades producidas del Tesla Roadster que se repartirán de 5 en 5 entre Asía, Europa y Estados Unidos.
¿y qué tiene de especial está edición? Básicamente una chuchería para mitómanos y coleccionistas. No esperes 30 o 40 caballos extra, ni una dieta de adelgazamiento, su valor añadido llega de la mano de un único color para estas 15 unidades, que serán decoradas con el Atomic Red, dos franjas recorriendo su carrocería, llantas en antracita y la correspondiente placa certificando que se trata de una de las últimas unidades de este deportivo eléctrico.
Digamos adiós al Tesla Roadster. A aquel que nos hizo soñar primero con la posibilidad de disfrutar de un deportivo eléctrico y ver que el futuro no sería tan negro para los deportivos. Esperemos que no sea un adiós, sino un hasta luego y en un par de años, con el Model S en el mercado, podamos contarte la llegada de un nuevo Tesla Roadster.
Fuente: Autoblog.it
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