Cual culebrón protagonizado por un famoso Chevrolet, Fisker sigue emitiendo comunicados a cada nuevo paso en relación a su problema con las baterías del Karma. En primer lugar, todo apuntaba a que los vehículos afectados bajarían de las 50 unidades, y que solo un escaso número de estos estarían en manos de sus clientes. Tras las primeras reacciones, adversas… ¿De que modo si no?, Fisker, en compañía de la NHTSA, decició implantar una reparación masiva que afectaría a un total de 239 unidades, y que tras escasos días desde su anuncio, se ha tornado en una sustitución completa de las baterías de toda la producción fabricada en 2011.
Sin meternos en el papel económico que puede suponer semejante llamada a revisión, la sustitución final de las baterías podría ser un movimiento «in extremis» para tranquilizar a los usuarios frente al contagio del miedo. Según los últimos datos en ventas, el caso del incendio del Chevrolet Volt en las instalaciones de la NHTSA, no ha afectado a las ventas de eléctricos en los EE.UU., pero una sucesión de eventos como este nuevo del Fisker Karma, podría desembocar en una fobia ante los posibles incendios de las baterías.
Si con la correcta colocación de las bridas podía arreglarse el supuesto fallo, es realmente extraño el que finalmente la sustitución total del Rack de baterías, sea la solución que más pueda llegar a darse entre los vehículos afectados. Además, se añade un interrogante a la cuestión: ¿Qué se va a hacer con las baterías que ya estaban montadas en caso de ser sustituidas?, pues si no han sufrido ningún problema relacionado con una subida de la temperatura, no deberían de tener problemas en su funcionamiento.
Claro está, que el apartado más allá del supuesto correcto estado de las baterías, es el de la confianza que puedan transmitir a sus propietarios. Por el momento, Fisker ha confirmado que repará o sustituirá según lo requiera cada caso, pero del procedimiento o de las pautas a seguir no ha transcendido nada. Habrá que esperar si la NHTSA vuelve a pronunciarse, junto al fabricante, para volver a ofrecer algún comunicado sobre el Fisker Karma, pero parece que todo podría empezar a solucionarse para Fisker, una vez se cierre este nuevo capítulo en la bacheada vida de su primer producto.
Fuente: AutoblogGreen
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