El gigante Tata es un fabricante que hasta la compra que Jaguar y Land Rover, hace relativamenteescaso tiempo, poco o nada figuraba en el referente de grupos automovilísticos. Un ejemplo que podía justificar dicha imagen, era la de una gama de modelos por debajo de lo que estamos acostumbrados en el viejo continente. Pero tras la adquisición de ambas marcas británicas, y a la reinvención de las mismas presente en sus nuevos modelos, nuestra idea sobre Tata cambio, y ahora el fabricante esboza nuevas ideas que podrían prometer sugerentes opciones de futuro.
El motivo del despliegue tecnológico de Tata ha sido el Salón del Automóvil celebrado en Nueva Delhi. En concreto, el fabricante indio ha presentado un vehículo 100% eléctrico (Tata Emo), un autobús que funciona gracias a la pila de combustible de Hidrógeno que incorpora, una berlina híbrida diésel (Tata Manza Hybrid), y varios vehículos equipados con motores capaz de funcionar con GNC. Hay que señalar, que tanto el vehículo eléctrico, como el autobús con pila de combustible, no son más que ejercicios conceptuales, pero que por lo menos son capaces de mostrar las vías de desarrollo de la marca.
Los vehículos adaptados para funcionar con GNC son el archiconocido Tata NANO, y un menos conocido, pero de amplia demanda en la India, Tata Magic Iris. En el caso del primero se trata de una conversión del motor instalado, pudiendo reconocer y seleccionar en que momento puede funcionar con gasolina o con GNC indistintamente. Merece cierta atención, el hecho de que el modelo Magic Iris haya sido adaptado para funcionar con GNC, sin perder por ello sus sistema de inyección mono-punto, un sistema ampliamente evolucionado en la actualidad, pero que deja latente la diferencia legislativa en cuanto a emisiones.
Por lo que entre opciones evolutivas más asequibles y prototipos, nos queda la hibridación de un modelo a gasóleo. Quizás la alternativas más lógica a la hora de querer vender un modelo más eficiente sin disparar los costes pretendiendo llegar a un vehículo eléctrico de prestaciones en consonancia. El Tata Indigo Manza Hybrid concept equipa un propulsor de 1,05 litros con tecnología Common-Rail y un propulsor eléctrico de 62 CV capaz de mover a la berlina de manera independiente con cero emisiones.
Además, el modelo híbrido diésel de Tata incorpora tecnologías tales como: la frenada regenerativa, baterías de Ion-Litio, función Start/Stop. Gracias a la aplicación de todas las tecnologías en pos de una mejora en la eficiencia, el concept híbrido promete unas emisiones líderes en el segmento inferiores a los 90 g/CO2.
Aunque se antojan bastante interesantes las posibilidades de la berlina híbrida de Tata, no nos debemos de hacer demasiadas ilusiones con la idea de poder verlo en nuestras calles. Es cierto que su base de modelo de calle refleja un idea más real que la de sus compañeros de exposición, pero en Europa, la gama Tata seguirá conformándose con una apuesta más modesta. Aunque sería justo admitir, que en Europa, la posibilidad de equipar una mecánica híbrida de escaso consumo, con unos acabados no demasiado buenos, pero con un precio muy atractivo, podría convertirse en una opción de compra muy interesante en la actualidad, que tome nota Tata de ello.
Fuente: GreenCarCongress
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