El fabricante de vehículos eléctricos no es un tema recurrente a la hora de hablar sobre problemas relacionados con este tipo de propulsión, más bien podría decirse que goza de cierta reputación, que justificada o no, siempre inclina la balanza hacia el lado más favorable cuando se juzgan sus productos. Sobre todo haciendo mención especial al aspecto que protagonizan sus acumuladores y las magníficas capacidades de las que hacen gala.
Pero resulta que no son todos sus clientes los que están de acuerdo con ese aura de calidad que rodea a la marca. En concreto hablamos de uno de los propietarios de una unidad del Tesla Roadster, donde se formula una queja tras un periodo de inactividad del vehículo, con el consiguiente agotamiento de la capacidad de la batería, que ha dado lugar a un daño irreversible en el acumulador que deberá de saldarse con el correspondiente reemplazo de las baterías por un coste de 40.000 $.
El caso es que por parte de Tesla se han apresurado en remarcar una de las precauciones en materia de mantenimiento que indica la marca, la obligada conexión del vehículo cuando este va a permanecer un determinado tiempo estacionado sin ningún tipo de uso. Estrictamente, Tesla explica que si nuestro Tesla Roadster permanece estacionado con una capacidad de alrededor del 50%, en un plazo de más de 15 días, esta capacidad podría ser agotada, por lo que se recomienda dejar conectado el vehículo para que las baterías no sufran un daño irreversible por este proceso de descarga.
El caso es que el propietario del Tesla Roadster reconvertido en pisapapeles, refleja en su queja que al menos existen hasta 5 casos que hablan de similares características de avería. La respuesta de Tesla ha sido apresurada y tajante al respecto: los vehículos convencionales necesitan un nivel de mantenimiento mínimo para su correcto funcionamiento a lo largo del tiempo, y en los vehículos eléctricos, el procurar dejarlos conectados en los tiempos de no-uso es un concepto obligado si se pretende mantener la salud de sus baterías.
Como apunte final, el fabricante californiano también alude a los sistemas de alerta y aviso sobre el nivel crítico de batería, unas advertencias tanto lumínicas como sonoras establecidas cuando el nivel de capacidad baja hasta el 5%. Por lo que parece, Tesla tiene bien cubiertas las espaldas en lo referente al correcto mantenimiento de sus baterías, por lo que habrá que permanecer a la espera para ver como se aclara la situación exacta en la que las baterías de los Roadster pasaron a mejor vida.
Fuente: AutoblogGreen
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