Además de ser uno de los fabricantes más involucrados en la electrificación del parque automovilístico a nivel mundial, la japonesa Nissan está también apostando de manera contundente por la implantación de un elemento asociado íntimamente a este tipo de vehículos, los puntos de recarga. Desde infinidad de apuestas que relacionan al Nissan Leaf con nuestro hogar y su equilibrio energético, hasta la planificación de rutas donde poder viajar con nuestro Leaf sin que su autonomía suponga un contratiempo en el camino.
Uno de los pilares básicos para fomentar el desarrollo de la propulsión eléctrica reside en eliminar la falta de puntos de recarga y el gasto de tiempo necesario para restaurar nuestras prestaciones. Con tiempos que suelen oscilar entre las 4 y 8 horas para poder cargar por completo nuestras baterías, el planificar un viaje, una escapada, o un trayecto fuera de lo habitual supone un gran quebradero de cabeza que puede encontrar la solución en los sistemas de carga rápida.
Bajo la certificación CHAdeMO de carga rápida para vehículos eléctricos, Nissan tiene previsto instalar un total de 400 puntos de recarga a lo largo de toda Europa para facilitar el acceso a este tipo de recarga. Gracias al uso de uno de estos puntos de carga rápida, un vehículo como el Nissan Leaf es capaz de volver a restaurar el 80% de sus baterías en 30 minutos. Un margen de tiempo que puede marcar la diferencia a la hora de plantearse la compra de un vehículo alternativo.
Según informa el fabricante japonés, esta apuesta por los cargadores rápidos de corriente continua contempla iniciativas tales como: la creación de corredores entre puntos estratégicos para poder realizar largos trayectos sin preocuparse por la autonomía de nuestro vehículo eléctrico. Bajo la patente propiedad de Nissan, estos nuevos cargadores serán fabricados e instalados por otras empresas y crearán dichos corredores entre capitales tales como París y Amsterdam.
El coste y tamaño de estos nuevos cargadores se han conseguido reducir hasta en un 50%, siendo la tarifa de adquisición el dato más importante, ya que hablamos de que la compra de uno de estos puntos partirá desde los 10.000 €. Con esta importante reducción del precio se pretende hacer más accesible este tipo de soluciones, aunque todavía queda por conocer el precio final que impondrán las empresas encargadas de gestionar dichos puntos. Además hay que destacar el hecho de que la recarga inalámbrica viene pisando fuerte y de manera contundente, por lo que aunque el acceso a este tipo de recargas se fomente, la simplicidad y eficiencia de las soluciones sin cables puede complicar el despliegue de los sistemas de recarga rápida.
Fuente: Nissan
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