Será la casualidad o un inesperado ánimo por revolucionar la competición desde sus más profundas raíces, pero el caso es que Le Mans, y todo lo que gira en torno a la mítica competición, está protagonizando importantes novedades de cara a convertirse en el referente de la evolución en materia de sistemas de propulsión. Un importante avance que abre la puerta a conocer las posibilidades en pista de nuevas formas de entender las carreras.
Si hace escasamente una semana conocíamos del primer prototipo híbrido en conquistar las 24 horas de Le Mans, más tarde nos hicimos eco de la profunda reestructuración del reglamento de cara a 2014 para convertir de nuevo a la disciplina en un auténtico laboratorio que tenga repercusión directa en la industria y el automóvil cotidiano. Ahora son las American Le Mans Series (ALMS) las que apuestan por desarrollar un prototipo impulsado por Gas Natural Comprimido en la próxima temporada 2013.
En concreto hablamos de un apuesta en firme para que la próxima temporada comience con un equipo impulsado por este combustible. Las únicas modificaciones que recibirá el nuevo prototipo del equipo Patrick Racing serán en lo concerniente a adaptación de su motor Chevrolet V8 código LS3, su sistema de alimentación y su tanque de almacenamiento para el gas. Este anuncio además aporta el detalle de que según el propio equipo, el GNC resulta ser un candidato ideal para competición dado su alto margen de empleo en altas relaciones de compresión.
Los pormenores y objetivos del equipo son desconocidos por el momento, pero dado el interés mostrado y las posibilidades del combustible nadie quiere aventurarse en descartar a este prototipo movido por GNC para ser considerado como un posible ganador de carreras.
El anuncio de este tipo de nuevas incursiones de sistemas de propulsión alternativa en competición se traduce en una muy buena noticia, tanto para el amante de la competición, como para el usuario de a pie que poco o nada le interesan estas disciplinas automovilísticas. Sin ir más lejos, la recientemente celebrada carrera de las 24 horas de Le Mans ha dejado ver como un vehículo con un propulsor mucho más pequeño, una potencia más contenida y un peso drásticamente reducido ha sido capaz de rodar en tiempos de prototipos de la categoría LMP2. Hablamos del Nissan Deltawing y su fantástico, aunque corto periplo en esta cita 2012.
Así, recopilando algunas de las apuesta que conocemos en estos momentos, la temporada 2013 de las Le Mans Series podrá ver motores funcionando con GNC, sistemas híbridos tanto acompañados de propulsores diésel como gasolina y el quizás más esperanzador proyecto de Green GT H2 y su barqueta eléctrica impulsada por una pila de combustible de Hidrógeno. Parece que Le Mans ha recogido el testigo de los aficionados que buscaban una mayor competitividad y un gran abanico de posibilidades dentro de una misma carrera.
Fuente: AutblogGreen | ALMS
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